El default o suspensión de pagos es un término habitualmente utilizado en finanzas para hacer referencia a una situación en la que un país no hace frente a las obligaciones legales que tiene con sus acreedores en la forma establecida en el contrato de reconocimiento de la deuda.
Según ha hecho público la agencia de calificación de riesgos Fitch, las consecuencias de las sanciones impuestas a Rusia por la invasión a Ucrania han dejado al país en una situación tan crítica que la situación de quiebra es inminente. El próximo día 17 de marzo la Federación Rusa tendrá que hacer frente al vencimiento de dos bonos de deuda por valor de 107 millones de dólares al que, por las sanciones impuestas, no podrá hacer frente.
Corralito ruso
Otro elemento que aproximaría la situación de default es el anuncio del Banco Central de Rusia de la imposición de un «corralito» para los ahorros que los ciudadanos rusos tienen en divisas extranjeras, ya que desde hoy hasta el próximo 9 de septiembre no se podrá adquirir dinero de otros países aunque sí podrá ser cambiado en rublos.
Además, se ha impuesto un límite máximo de 10.000 dólares para sacar dinero en efectivo en otras divisas.
La Bolsa de Moscú permanece cerrada
Los mercados de valores rusos seguirán sin actividad. Así lo ha anunciado en un comunicado en el que se explicita que «el Banco de Rusia ha decidido no reanudar las sesiones de negociación para este 9 de marzo en la Bolsa de Moscú».
Por otro lado, London Stock Exchange Group, ha confirmado la suspensión de los títulos depositarios representativos de acciones extranjeras de 35 entidades rusas o con una estrecha vinculación al país.
