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La generación olvidada

María José Sánchez Soria
María José Sánchez Soria
Mujer y socialista. Activista social y curtida por mil frentes en la vida. Optimista vital en cada lucha y animosa en la dificultad. Hija del 64 y heredera de todas cuantas me precedieron en la búsqueda de justicia.
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análisis

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Hoy todos nos acordamos de nuestros mayores, pero durante muchos años gran parte de nuestros mayores estaban “aparcados” en las residencias o en sus propias casas, sin recibir a penas visitas de sus familiares, ni amigos. Como si fueran unos apestados, se les dejaba en el cajón del olvido, sin ningún tipo de remordimiento.

Hoy que después de mes y medio de confinamiento hemos tenido tiempo para pensar y replantearnos la vida. Cuando esta pandemia nos ha puesto de cara a la realidad, nos damos cuenta que en muchos casos no les hemos dedicado todo el tiempo que necesitaban, que les debíamos, lo que merecían. En algunos casos, ya es demasiado tarde, están pasando la pandemia solos, o han muerto.

Vivieron la postguerra, supieron lo que es el hambre, las dificultades, lo que es la vida sin agua corriente, sin luz en las calles, sin teléfono y sin televisor. Intentaron por todos los medios que nosotros, sus hijos, no sufriéramos nada de lo que ellos pasaron, nos dieron educación, y todo lo que estuvo a su alcance, quitándoselo de sus propias necesidades o caprichos, para que nosotros fuéramos unos privilegiados.

Y nos volvimos una generación egoísta, que sólo pensaba en ser el mejor en tu trabajo, en ser feliz en tu matrimonio, en darles todos los caprichos a nuestros hijos, tener el coche mejor, una segunda vivienda, nuestras vacaciones, etc… Llenamos nuestra vida de cosas materiales, y no teníamos tiempo para nada que no fuera nosotros mismos.

Hoy que no podemos despedirles, ni acompañarles en sus últimos momentos, nos damos cuenta de su importancia. Y le echamos la culpa a la pandemia, al Gobierno, a las residencias, para intentar ahogar nuestros remordimientos y nuestro legítimo dolor. Yo propongo que cuando esto acabe se les haga el homenaje que siempre han merecido, que nos juntemos y hablemos de ellos, mostremos las  fotos mas entrañables, que les recordemos en sus momentos más importantes, y así les haremos Justicia, y entre todos ayudar a curar nuestras heridas.

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