Vacunarse cuando no toca puede ser un delito, más allá de las responsabilidades políticas. Así lo entiende, al menos, la Fiscalía e Murcia, que ha abierto diligencias para investigar si ha habido delito en el proceso de vacunación contra el coronavirus del exconsejero de Salud, así como de otros miembros y altos cargos de la Consejería, sin estar dentro de los grupos prioritarios del protocolo establecido por el Ministerio de Sanidad.
Así, el fiscal jefe de Murcia, José Luis Díaz Manzanera, ha comunicado que se han incoado las diligencias de investigación relativas a las denuncias que han sido presentadas tanto por Podemos como por el PSOE de la Región de Murcia.
En concreto, el escrito que los socialistas han hecho llegar al fiscal le pide que investigue la vacunación del exconsejero de Salud, Manuel Villegas, y de 400 trabajadores de la que era su Consejería, saltándose el protocolo establecido por el Ministerio de Sanidad «por si pudiera constituir algún tipo de delito».
Como se recordará, el ex consejero de salud se vio obligado a dimitir por utilizar su cargo para vacunarse cuando no le correspondía.
Otros casos
No se descarta que la Fiscalía actúe también en otras comunidades donde han ocurrido los mismos hechos al saltarse las autoridades, incluso un obispo en Palma, el protocolo de vacunación.
Mientras cada día se van conociendo más casos, de momento, al menos, están confirmados 14 dirigentes del PSOE, nueve del Partido Popular, dos de Junts per Catalunya y dos exconcejales del PNV. Además, del obispo Sebastià Taltavull, que ya ha admitido que se vacunó el pasado 5 de enero en la residencia Sant Pere i Sant Bernat de Palma, aunque, en su defensa, asegura que él no solicitó «ser vacunado».