La Fiscalía Anticorrupción abre diligencias contra la CUP por un supuesto delito de malversación. Los indicios parecen indicar que la formación independentista destinó parte de su presupuesto, asignado para el desarrollo de sus actividades como grupo parlamentario, a la financiación de la celebración del Referéndum del 1 de octubre de 2017.
Iniciativa de Ciudadanos
La Fiscalía abre la investigación estimando la propuesta de Ciudadanos en la Sindicatura de Comptes, organismo externo e independiente del ejecutivo que se encarga del control de las entidades del sector público. La formación liderada en Cataluña por Carlos Carrizosa exigió que se rindieran cuentas sobre las supuestas subvenciones a “actividades ilegales” en torno a la celebración del referéndum.
Un dirigente investigado
Según ha informado el diario Ara, algunos de los proveedores de la CUP para la campaña están siendo citados a declarar. Desde febrero son ya 15 las personas que supuestamente han pasado a prestar testimonio delante de un juez y uno de los dirigentes de la formación ya está siendo investigado. Se retoma así el curso de unas citaciones que se habían interrumpido durante el confinamiento
Gastos en publicidad del 1-0
La CUP deberá afrontar una investigación que pretende demostrar que una partida de 168.666,63 euros fueron destinados a financiar la campaña del 1-0. Algo que la formación parece no haber ocultado en ningún momento. Ya que la CUP justificó supuestamente gastos en “publicidad, relaciones públicas y propaganda” del 1-0 en un informe sobre la contabilidad específica de las subvenciones a los grupos parlamentarios
Dando la cara
Los miembros de la formación están dando la cara y mostrando imágenes de los actos celebrados durante el periodo de campaña para la celebración del 1-0. La entonces diputada Eulàlia Reguant ha publicado en su perfil de twitter: “Sí, hicimos campaña. Centenares de actos. Miles de militantes por todo el territorio”, y acompañando el mensaje una foto en un acto en el que participó. En un sentido similar se muestra la diputada de la CUP, Maria Sirvent, que ha colgado un vídeo de un acto en Terrassa acompañado del texto: “En uno de los más de 400 actos que la CUP celebró durante la campaña del referéndum del 1-O”. Queda de esta manera reflejado lo extraño de la actitud de los supuestos malversadores. Que lejos de esconder su delito, presumen de él. Claro que, seguramente, el asunto tiene más de desafío político que de malversación. Hará falta ver si los jueces pueden ir más allá de la literalidad de una ley, que como tantas otras, se está quedando corta para juzgar lo que pasa en Cataluña.
