La detención del ex informático del HSBC suizo, Hervé Falciani, por orden de la Audiencia Nacional cogió de sorpresa a mucha gente. ¿Por qué precisamente ahora se le detiene después de que la propia Audiencia ya denegara hace dos años la extradición a Suiza?

Es evidente que, viendo la situación política española y las dos personas relacionadas con el proceso independentista catalán que se encuentran actualmente en el país helvético, existe una relación por más que el Gobierno haya negado cualquier analogía. No obstante, todo parece indicar que esta detención es uno de los puntos clave para un «intercambio de prisioneros», a pesar de que ni Marta Rovira ni Anna Gabriel estén detenidas aún por la Justicia suiza.

Por otro lado, sorprende la detención de Falciani, sobre todo por la repercusión que tuvo la lista de grandes evasores fiscales que filtró y que provocó que tuviera que huir de su país. Es sorprendente que el sistema busque siempre culpables en los denunciantes y no en los denunciados. De la Lista Falciani, ¿cuántos de los evasores se encuentran detenidos, investigados, imputados, procesados o investigados? Ninguno.

Recordemos el caso de la familia Botín que tenía en dicho banco 2.000 millones desde el año 1.936, cantidad que fue ocultada al fisco por tres generaciones de los Botín y que, tras su aparición en la Lista Falciani, no fueron imputados por evasión fiscal saldando todo el asunto con el pago de una multa a la Agencia Tributaria, tal y como ya publicamos en Diario16. Otros nombres ilustres que se encontraban en esa lista son la familia Luca de Tena, Emilio Saracho, la familia Prado, el ex magistrado del Supremo Ramón López, el ex presidente del FC Barcelona Alfons Godall, Jordi Pujol Junior (quien ya estuvo encarcelado, pero no por estar incluido en esta lista), el presidente de Abanca Juan Carlos Escotet, el ex presidente de CajaCanarias Rodolfo Núñez Ruano, el médico Eufemiano Fuentes o las Religiosas de San José de Girona, entre otros.

El hecho de que Emilio Saracho estuviera en esa lista concuerda a la perfección con lo ya expuesto por Diario16 en referencia al pago por parte de JP Morgan en una entidad suiza de la cantidad de 86 millones condicionada a que el banco de inversión americano se hiciera con el contrato para vender el Banco Popular, una transferencia que se hizo a través de KMPG.

Sin embargo, a quien detuvo la policía fue al denunciante, a Hervé Falciani y, por mucho que el Gobierno afirme que nada tiene que ver con que Marta Rovira o Anna Gabriel, la oportunidad del momento podría indicar que se habría podido llegar a un acuerdo con Suiza.

Lo que queda claro es que quienes se atreven a denunciar la corrupción de las élites financieras internacionales suelen convertirse en los criminales mientras que los que realmente están vulnerando la ley son los que quedan absueltos. Así funciona este mundo.

1 COMENTARIO

DEJA UNA RESPUESTA

Comentario
Introduce tu nombre