El diputado de la CUP, Carles Riera, ha mostrado su apoyo a la investidura del candidato de Juntos por Cataluña, Quim Torra, durante su intervención en la segunda sesión del debate de investidura a la presidencia de la Generalitat. Afirma que su formación se abstendrá para facilitar la investidura de Torra, aunque advierte que seguirán permaneciendo en la oposición y su apoyo se trata de una mera “excepcionalidad anti-represiva”.
De esta manera, Riera ha expresado que la CUP no bloqueará la investidura y pasará a la oposición “para impulsar políticas republicanas en favor de las clases populares, mantener las soberanías, desde la desobediencia civil no violenta y desde la instituciones cuando haga falta».
Esta posición se produce después de que su formación se reuniera el domingo para decidir si “propiciaban el bloqueo de la investidura o la bloqueaban”. Finalmente, con la decisión de abstenerse, aclara que “no damos apoyo a su Govern” sino que se trata de una medida frente al Estado.
Insiste en que su apoyo se debe a una medida en contra de la represiones que entiende que está sufriendo Cataluña. Por ello, lo denomina una medida excepcional “anti-represiva ante el embate del Estado” con el fin de “impulsar un frente unitario” y poder “construir un independentismo inclusivo y no identitario”.
A pesar de estas palabras, el diputado de la CUP ha querido aclarar que su formación no está garantizando futuros apoyos al Govern de JxCat-ERC puesto que “estamos y estaremos en la oposición por fidelidad al 1 y el 8 de octubre”.
Entre los objetivos de su formación está el poder “recuperar las leyes suspendidas por el Tribunal Constitucional” y entienden que “no es posible mejorar las condiciones de vida de los catalanes dentro del régimen del 78 español”.