Puigdemont reconoce que los mensajes son suyos. «Soy periodista y siempre he entendido que hay límites, como la privacidad, que nunca se tienen que violar. Soy humano y hay momentos en que también yo dudo. También soy el presidente y no me encogeré ni me echaré atrás, por respeto, agradecimiento y compromiso con los ciudadanos y el país. ¡Seguimos!», ha dicho.
Sóc periodista i sempre he entès que hi ha límits, com la privacitat, que mai s’han de violar. Sóc humà i hi ha moments que també jo dubto. També sóc el President i no m’arronsaré ni em faré enrere, per respecte, agraïment i compromís amb els ciutadans i el país. Seguim!
— Carles Puigdemont (@KRLS) January 31, 2018
Comín responde a la divulgación de los mensajes de Puigdemont. «La divulgación de secretos es delito», advierte. La unidad del independentismo está «absolutamente garantizada», asegura.
1. La revelació de secrets (obtenir subreptíciament les converses de tercers) és delicte a Espanya i a Bèlgica, mereixedor per tant de les pertinents accions legals. A banda que qualsevol missatge tret del seu context perd sempre el seu significat.
— Toni Comín (@toni_comin) January 31, 2018
Telecinco ha desvelado en exclusiva los whatsapps del expresident al exconseller, Toni Comín, captados por un reportero de la cadena, donde se puede leer, que el líder de JxCat “siente que los suyos lo han sacrificado y que es el momento de retirarse de la primera línea”.
Esta batería de mensajes, fueron enviados sobre las 20.30 horas, en un acto soberanista de Lovaina.
“Los nuestros nos han sacrificado, al menos a mí. Vosotros seréis consellers (espero y deseo), pero yo ya estoy sacrificado tal como sugería Tardà”, asegura Puigdemont.
Según escribía Puigdemont a Comín después de que se aplazara el pleno de investidura, “el plan de Moncloa triunfa. Solo espero que sea verdad y que gracias a esto puedan salir todos de la cárcel porque si no, el ridículo es histórico”, Puigdemont espera que su renuncia sirva para que Junqueras, Forn y los Jordis puedan salir cuanto antes de prisión.
Puigdemont le dice a Comín, que ahora se dedicará a limpiar su honor de los ataques que ha recibido desde que llegó a la Generalitat. “No sé qué me queda de vida (¡espero que mucha!), pero la dedicaré a poner en orden estos dos años y a proteger mi reputación. Me han hecho mucho daño, con calumnias, rumores, mentiras, que he aguantado por un objetivo en común. Esto ha caducado y me tocará dedicar mi vida en defensa propia”, dice de forma categórica.
Fuentes republicanas dan completa veracidad a la conversación. Mientras Comín anuncia una querella contra el programa de Ana Rosa Quintana.
El abogado de Comín confirma que la conversación con Puigdemont tuvo lugar, pero que los mensajes “están sacados de contexto”.
Los mensajes se enviaron a través de la aplicación de mensajería Signal, parecida a WhatsApp que presume de ser más segura. El problema es que Comín no contaba con que detrás tenía a un cámara del programa de Ana Rosa grabándole.
En los mensajes, el candidato de JxCat admite que se vuelven a vivir «los últimos días de la Cataluña republicana». «El plan de Moncloa triunfa, solo espero que sea verdad y que gracias a esto puedan salir todos de la cárcel porque si no el ridículo histórico, es histórico», escribe el expresidente catalán.
«Supongo que tienes claro que esto se ha terminado. Los nuestros nos han sacrificado, al menos a mí. Vosotros seréis consellers (espero y deseo) pero yo ya estoy sacrificado, tal y como sugería Tardá», escribe.
«No sé lo que me queda de vida (¡espero que mucha!), pero la dedicaré a poner en orden estos dos años y a proteger mi reputación. Me han hecho mucho daño con calumnias, rumores, mentiras que he aguantado por un objetivo común. Esto ahora ha caducado y me tocará dedicar mi vida a la defensa propia», afirma.
«Lo que dicen en privado no tiene nada que ver en público. Todos sabemos que llevan meses haciendo esta farsa. Es hora de que le digan a la gente la verdad», ha afirmado la líder de Ciudadanos en Cataluña, Inés Arrimadas.