Vamos a conocer a la histamina. Histamina es multifuncional: forma parte del SI(Sistema Inmunitario), habla con el cerebro (neurotransmisor), además de encargarse de la contracción (involuntaria) del tejido muscular liso de órganos con esta estructura. A saber: venas, vasos sanguíneos y linfáticos, estómago, intestino delgado y grueso, vejiga y útero. También la encontramos en la piel, pero no con la función de contracción y nace en varias partes del cuerpo. Es importante la labor que hace, pero como todo en mucha cantidad nos puede hacer daño.
En un cuerpo sano, nuestra protagonista nace en células de la médula ósea (súper simplificado linfocitos y plaquetas), en las neuronas, en múltiples células en la mucosa gastrointestinal… vamos, que es un poco de todos los lados. ¿Te has quedado con lo del músculo liso? Eso es importante ya que en este espacio hablamos del tema ciclo es donde nos vamos a centrar.
Huelga decir que nuestra vida actual favorece que tengamos una inflamación casi permanente. Yo me imagino que una la vida de la histamina en el campo, en un organismo al que no le matan las prisas, la agresividad, la falta de descanso y demás, es como relajada: “tengo claras mis funciones, que son múltiples, pero voy al trantran”. Y la historia de una histamina urbanita que afronta la contaminación, el estrés, los alimentos procesados, los horarios locos, los pequeños traumas acumulados y grabados a fuego en el cerebro, la contaminación lumínica, acústica, alimentaria y ambiental… pues nos dejan un estupendo panorama para que a nuestra colega se le pire la pinza y la fiesta reactiva se le vaya de las manos.
¿Cómo te puedes sentir al tener altos niveles de histamina?
-Ansiedad, irritación emocional, neblina mental.
-Dolores musculares, de espalda y de articulación.
-Fatiga, esta sensación de cansancio constante (como cuando llega la primavera y te tienes que acoplar al cambio de hora).
-Problemas de sueño, despertares, insomnio…
-Problemas de digestión, gases.
-Migrañas…
-Congestión nasal, sinusitis…
-Hipersensibilidad mamaria…
¿A qué te suena? En la fase premenstrual, la que viene antes del sangrado, muchos de estos síntomas son notorios. Pero vamos a ver qué sustancias la equilibran para que entiendas como todo el engranaje que es nuestro cuerpo a veces se queda sin recursos y le tienes que echar un cable de manera consciente.
Histamina tiene colegas que bajan los niveles de su actividad (repito que estoy simplificando muchísimo todas las respuestas que supone en el organismo), las DAO (Diamino Oxidasa se llaman las colegas) son enzimas que cuya presencia se encuentra sobre todo en la mucosa gastrointestinal. Ellas se encargan de eliminar la histamina presente en muchos alimentos Lo que ocurre es que en muchos casos esa mucosa está dañada y por lo tanto se genera un déficit de DAO. Quédate con este dato.
En el caso del ciclo menstrual, la histamina aumenta su presencia cuando suben los niveles de estrógenos, esto es justo antes de la ovulación, y durante la premen… antes del sangrado.
Verás, la progesterona nace en el cuerpo lúteo. Imagina el hueco que deja el óvulo cuando se libera, pues en ese hueco se genera una sustancia amarilla, el cuerpo lúteo, es como si cicatrizase ese lugar y se encargase de relajar todos los tejidos: un centro de mando antiinflamatorio. La progesterona baja los niveles de inflamación, de estrógenos y de histamina. La progesterona es el equilibrio. Es muy importante para la salud emocional, mental y física.
¿Qué pasa si no ovulas? A veces tenemos ciclos anovulatorios, tenemos ovarios poliquísticos o algún otro problema endocrino que anula la ovulación. Sin ese hueco para el cuerpo lúteo, los niveles de progesterona son muy bajos, por lo tanto aumenta la reacción inflamatoria en todos los sentidos.
¿Qué podemos hacer? Sabiendo esto, a parte de buscar una buena persona profesional de la microbiota que nos ayude a suplementar para mejorar los niveles de DAO, nosotras podemos empezar por eliminar los alimentos que aumentan los niveles de histamina. Por ejemplo, eliminar los lácteos de vaca (aumentan su producción) y los alimentos fermentados (contienen histamina y es conveniente moderar su consumo en casos de inflamación) en las fases más críticas (ovulación y premenstruación). En caso de dismenorreas (menstruaciones dolorosas) y SPM muy acentuado deberíamos eliminar de nuestra dieta alimentos que aumenten los niveles de histamina en el organismo. Te animo a que busques e investigues, a que empieces a observar tu cuerpo y cómo reacciona ante ciertos alimentos y cómo reacciona tu mente ante diferentes situaciones en el día a día. Puede que no siempre el bolsillo nos ayude a acceder cierta ayuda, pero en tu cesta de la compra puedes hacer muchísimo por ti.
Un abrazo gordo y cuida de tu cosmos.
Fuentes de apoyo:
