La Casa Real tenía mucho interés en que la investigación que tiene abierta la Fiscalía sobre la fortuna de Juan Carlos I no estuviese archivada antes del discurso de Navidad de Felipe VI. Sin embargo, no va a ser así, puesto que el cierre de las diligencias está a la espera de recibir unos documentos que tienen que llegar desde Suiza, lugar donde el rey emérito presuntamente ocultaba, según se desprende del proceso abierto en el país helvético, parte de su fortuna.
En concreto, los fiscales que investigan las finanzas del rey emérito, Juan Ignacio Campos y Alejandro Luzón, esperarán a recibir la documentación solicitada a Suiza por medio de comisión rogatoria antes de cerrar la investigación. Por tanto, no descartan solicitar una prórroga de una investigación que expira en diciembre.
Esto favorece a Felipe VI, puesto que, de solicitarse la ampliación del plazo, se daría la circunstancia de que el cierre de la investigación se hiciera público después de Navidad, por lo que el discurso del Rey no se vería empañado por ese archivo de diligencias.
Además, según ha publicado Europa Press, la Fiscalía pretende acabar con las diligencias de investigación lo más rápido posible. Sin embargo, la nueva prórroga podría ser visto como un nuevo movimiento para que el más que previsible archivo de la investigación contra el rey emérito no afecte aún más a la imagen de la Monarquía y de Felipe VI. Esta interpretación es desmentida por las fuentes de la Fiscalía citadas por la agencia de noticias.
Fue a finales de este verano cuando se supo que los fiscales que dirigen la investigación sopesaban el archivo de las diligencias teniendo en cuenta que algunos de los presuntos delitos habrían ocurrido antes de junio de 2014 cuando Juan Carlos 1 era inviolable, que otros habrían prescrito y que se da una falta de peso probatorio en otros, sumado a que se han dado dos regularizaciones fiscales por parte del emérito por una suma que ronda los 5 millones de euros. Sin embargo, parece que la Fiscalía no tiene en cuenta que el hecho de que se produjeran las regularizaciones es un reconocimiento de culpa por parte del rey emérito.
Las pesquisas sobre la fortuna y las sociedades del emérito se han extendido durante más de un año. En concreto, la Fiscalía del Supremo indaga en tres asuntos relativos al emérito: el supuesto cobro de comisiones por la concesión del AVE a La Meca a empresas españolas; el presunto uso por parte de Juan Carlos 1 y otros familiares de tarjetas de crédito opacas con cargo a cuentas en las que no figuran como titulares; y la existencia de una cuenta con 10 millones de euros a nombre del ex jefe de Estado en la isla de Jersey, un paraíso fiscal.
