Hoy se ha presentado el informe realizado por el grupo de trabajo contra las Detenciones Arbitrarias de Naciones Unidas en el que se presenta un riguroso análisis de las situaciones en las que se han vulnerado Derechos Humanos en sus países miembro.
El informe se ha presentado de manera oficial ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
Precisamente en el mes de junio este medio ya informó al respecto del trabajo que venía realizándose desde el grupo de expertos sobre la materia.
El informe hace referencia a la situación de los presos políticos catalanes y exige que se les ponga inmediatamente en libertad. Además, plantea que los presos sean indemnizados por el tiempo que han estado privados de libertad. La reacción del Gobierno de España fue inmediata: se apresuraron a desacreditar al grupo de trabajo, a sus miembros y a restarle valor a sus informes. Llamó la atención, por ejemplo, el cambio de criterio de Irene Lozano, actual Secretaria de Estado para España Global que hace no mucho valoraba el trabajo que se venía realizando desde Naciones Unidas cuando se referían a la situación de los presos en Venezuela.
España, ausente en el debate
La actitud de España en este asunto sigue siendo sorprendente. Hoy ha evitado participar en el debate. Respuesta que se suma al silencio ante la petición que realizaron los miembros del grupo de trabajo, que solicitaron una visita a España para continuar investigando en su informe: no han obtenido respuesta por parte del Gobierno.
España había solicitado turno de palabra para poder intervenir en el debate, pero cuando ha llegado su turno, su representante se ha ausentado de la sala.
Fuentes consultadas a este diario, que están realizando un seguimiento sobre esta cuestión, nos indican que se ha perdido una magnífica oportunidad para que se trasladase allí las valoraciones que desde España habían hecho sobre el informe, al que consideraron que se trataba de una “campaña de desinformación e intoxicación”.
Se les ve la cola de paja. Como podemos dejar que gente de esta «clase» nos siga dirigiendo. Vergüenza , vergüenza que, se perdió entre los cadáveres de nuestros muertos por, la sanguinolenta rebelión fascista.
Vivimos en un estado terrorista que, protege criminales, recompensa y torturadores con la connivencia de una secta católica que, perdió el rumbo cristino, para convertirse en «paraguas» de un criminal genocida bajo palio.
Ausentarse significa NO DAR LA CARA, esto un niño lo sabe. Bueno, un país como España que tantísima RESPONSABILIDAD tiene con la entrada de inmigrantes a Europa, que tantísima obligación ética tiene en que la CRISIS que afronta no haya dejado totalmente abatidos en derechos a tantísimos españoles e inmigrantes, ¿cómo no da la cara ya o no hace los deberes de mínimo RESPETO que se le exige? A ver, a ver si se atreven a eso, que mucho presumen de valientes pero todo queda en gatillazo? http://concursosypremiosjoserepisomoyano.blogspot.com/ A ver.