Hablamos con Elena Rábade, ex- magistrada, jurista y feminista, quien resume el caso de la sentencia dictada contra ‘la Manada’, como una cuestión de mentalidad patriarcal de la justicia. “La jurisprudencia debe cambiar, porque la sociedad lo reclama y es preciso hacer realidad el principio de igualdad, incorporando a la justicia, la perspectiva de género”. No solo es cuestión de que haya más mujeres, sino de que estas o estos tengan “más formación de género”.
El Tribunal del caso de ‘la Manada’ ha optado por dictar una sentencia que condena a los cinco acusados a nueve años de prisión, por un delito continuado de abuso sexual con prevalimiento a una joven durante los Sanfermines de 2016. La Sala en cambio los absuelve de agresión sexual.
Según el Código Penal, el delito de abuso sexual consiste en acceder al cuerpo de otra persona sin consentimiento, pero sin violencia física o intimidación.
Elena Rábade, afirma como feminista que esta justicia es patriarcal y “da igual que la impongan hombres o mujeres, todos ellos tienen la misma mentalidad, dando mucha más credibilidad a cualquier afirmación que realiza un hombre, que no a las afirmaciones que no realizan las mujeres, a las que se nos sigue considerando seres débiles mentalmente, ignorantes, mentirosas, y la maldición de Adán, y por tanto dignas de muy poca credibilidad”.
Todavía “no hemos llegado al momento de que los jueces aplique la ley con perspectiva de género, no se está haciendo la justicia adecuada, ya que se está amparando en un sistema muy patriarcal que abarca a las instituciones, incluida la administración de justicia”, afirma esta especialista para Diario16.
Hechos probados
La valoración que hace Elena Rábade como jurista, es que los hechos probados que figuran en la sentencia es que “sí nos indican que es una agresión sexual”. Los jueces han valorado que existía solamente abuso y no agresión -que no existe intimidación-. Para la ex-magistrada, esa es una cuestión que es relativa, “aunque existe jurisprudencia sobre la intimidación, yo creo que una chica que está sola dentro de un descansillo de un portal con cinco hombres, que le llevan 10 años, sí sufre una situación de intimidación y que no hace falta que sea Juana de Arco para demostrar que se niega a esta situación”. Para Rábade en esa situación si sufre intimidación porque evidentemente siente miedo, y eso lo sabe cualquier mujer”.
Elena Rábade apoya a las mujeres feministas que salen a la calle porque “es comprensible la indignación. Como jurista y feminista al mismo tiempo, creo que todas estas cuestiones tienen que resolverse a través de los cauces legales que están establecidos por nuestro Estado de Derecho”, ha contado a Diario16.
Es partidaria de promover modificaciones de la Ley y de la jurisprudencia por los cauces legales que se nos permite. Por eso cree que hay que trabajar en este sentido.
Para la ex-magistrada es necesario que toda la sociedad, “nos pongamos de una vez las gafas moradas para ver el mundo a través de los ojos de las mujeres. Porque solo las mujeres que hemos nacido mujeres sabemos lo que sentimos”.
Para Rábade la intimidación que pueden sentir las mujeres delante de un hombre “qué es el doble de tamaño que ella y que está en un lugar a solas contigo” una mujer lo sabe instintivamente desde el principio y “también sabe amoldarse a las circunstancias porque puede correr peligro su vida”.
Ante la pregunta, ¿qué siente una mujer cuando oye pasos por detrás en la calle y se da la vuelta y ve que es otra mujer? todas contestaron lo mismo, alivio. Para Elena Rábade “esto ya te está diciendo bastante de lo que puede sentir una mujer con un tío dentro del portal, imagínate con cinco”, ha afirmado.
Las mujeres han estado relegadas de los puestos dónde se han hecho jurisprudencia. Las mujeres están reclamando que las dejen entrar y “para que expliquemos porque pasan estas cosas que hasta ahora se ha visto con los ojos de un hombre, que se ha criado como hombre, con mentalidad patriarcal.” reclama la ex-magistrada.
Existe la imperiosa necesidad de empezar a hacer jurisprudencia con perspectiva de género, Para la Jurista es necesario que está llegue al Supremo, “y sea confirmada en el Constitucional, y estos elaboren toda la jurisprudencia que sea necesaria, para que después baje hasta los tribunales de base”.
Las mujeres están saliendo a la calle por un sentimiento de estar hartas, porque todas las mujeres más de una vez se han sentido en peligro en determinadas situaciones, “y aquí me incluyo”, afirma Rábade. “De que se malinterprete lo que decimos las mujeres o lo que hacemos”. Para la jurista y feminista “estamos hartas muchas de que no se nos crea cuando decimos las cosas”, por eso “estamos dando un puñetazo en la mesa y diciendo hasta aquí hemos llegado. No queremos pasar miedo nunca más”.
Esta sociedad no merece que un cincuenta por cierto de su población viva en el miedo.
