Si hay algo altamente venerado y respetado en Francia son los símbolos que representan las esencias de esa nación. Uno de ellos, el más importante, es el 14 de julio, fecha en la que se conmemora la toma de la bastilla  en 1789 y con ello el fin de la monarquía y el comienzo del Estado actual: la República.

Ayer 14 de julio los franceses celebraban su fiesta nacional en las calles de los pueblos y ciudades. En Niza, capital región Provenza-Los Alpes-Costa Azul, de también, y especialmente en el Paseo de los Ingleses el rostro bello y amable de la ciudad mediterránea.

Miles de personas, franceses y turistas, formaban una multitud apiñada cuando hacia las 11 de la noche un camión de once toneladas conducido por un joven francés de 31 años y de origen tunecino embestía a uno de los grupos de personas allí concentradas y las arrollaba causando, hasta ahora, 84 muertos, según acaba de informar France Presse. El terrorista residía en Niza.

La crueldad y la bestialidad fue tal que el terrorista tras aplastar a sus primeras víctimas continuó su macabra marcha durante dos kilómetros produciendo más víctimas hasta que fue abatido a tiros por policías a los que antes de morir se enfrentó con su pistola.

Demás de los fallecidos, 84 hasta ahora, el atentado ha dejado más de un centenar de heridos estando 18 de ellos en situación crítica.

Las víctimas, en su mayoría, eran familias que asistían a los festejos y entra ellas hay niños, según confirmó el presidente francés Hollande, quien confirmó que se trataba de una acción terrorista y que su país reforzará su presencia en Siria para incrementar la lucha contra el Estado Islámico. El IS no ha confirmado su autoría pero en las redes sociales varios de sus seguidores sí.

En noviembre de 2015 Francia sufrió otro duro golpe yihadista cuando fueron atacadas una discoteca y otros lugares provocando 131 muertos.

En aquella ocasión, algunos de los autores residían en Francia o eran franceses de origen árabe, como ahora en Niza.

DEJA UNA RESPUESTA

Comentario
Introduce tu nombre