Esta semana conocíamos la intención del Ayuntamiento de Badalona de suspender la actuación ya programada del actor, director y productor Joel Joan. Una decisión unilateral, sin motivo, y sin precedentes, que se anunciaba por la concejal de Cultura en redes sociales y de la que desde el consistorio no informaron al actor.
Se suponía que el motivo era un video publicado por el propio Joel Joan, en sus vacaciones: su vida privada en la que no se cometía ningún tipo de acción delictiva, ni infracción de ningún tipo. Sencillamente, Joel aparecía en modo «festivo», algo que no habría sentado bien a los conservadores que gobiernan en el consistorio de Badalona.
A pesar de haber anunciado en redes que suspenderían la obra del actor, no ha sido posible llevar hasta el final su intento de censura. Y no lo ha sido porque el respaldo al actor ha sido tal, que los partidos de la oposición se reunieron de manera urgente para abordar esta cuestión, haciendo valer su mayoría en el Consejo de Administración de Badalona Cultura, logrando que no se pudiera llevar a cabo la suspensión de la obra.
Guanyem Badalona, ERC, JxCAT, los Comunes y el PSC se han puesto de acuerdo para plantar cara al intento de censura que el Ayuntamiento continúa intentando justificar.
Desde el Ayuntamiento pretenden insistir en que la censura de la obra tenía que ver con un comentario que hacía Joel en su video, en el que aparece supuestamente algo bebido a bordo de una lancha, y en la que hace una serie de comentarios irónicos, que algunos han interpretado como una alusión a las vacaciones de algunas celebridades -donde se podría incluir a la Casa Real- que muestran sus lujos y sus excesos en las redes sociales e incluso en las revistas del corazón. De hecho, Joel «vacilaba» con el lugar donde se encontraba, como si estuviera en un barco privado suyo, en medio de las aguas de algún lejano paraíso: muchos sí entendieron la ironía del actor, que ni estaba en lejanas aguas, ni estaba en su propio yate, ni por supuesto pretendía insultar a la tripulación. «Se entendía perfectamente el tono irónico de Joel, que pretendía hacer una crítica tirando de una ironía salvaje, que por lo que se ve no han entendido desde el Ayuntamiento», nos apuntan desde el entorno artístico del actor.
Y es que, por si alguien tenía dudas, después de ese vídeo, Joel subía otro en el que rememoraba el «lo siento mucho, no lo volveré a hacer» del rey emérito, por lo que la cuestión quedaba aún más enmarcada en su irónica burla.
