En los últimos tiempos nos encontramos con casos en los que la comercialización de productos por parte de las empresas, sobre todo de la banca, a través de procesos comerciales basados en la falta de transparencia está generando muchos perjuicios a la ciudadanía. Lo estamos viendo en el caso del IRPH donde incluso el Tribunal Supremo ha determinado a través de sentencia que esa falta de transparencia no es causa de la abusividad de la cláusula y, en consecuencia, no hay sanción para la entidad bancaria.
El Gobierno ha aprobado una serie de medidas que facilita que los consumidores recuperen su dinero más rápido y exigir las cantidades del perjuicio económico derivado de la aplicación de una cláusula abusiva.
Sin embargo, y en virtud del principio de primacía del Derecho Comunitario, además del artículo 83 de la Ley de Consumo en nuestro ordenamiento jurídico, que especifica que la falta de transparencia de una cláusula predispuesta comporta su consideración de abusiva y, por tanto, su nulidad de pleno derecho de la Ley de Consumidores y Usuarios española.
Por esta razón, el Gobierno se ha quedado corto y está obligado a ir más allá de la recién aprobada modificación del régimen sancionador de la ley de consumidores y debe incorporar la falta de transparencia como elemento susceptible de sanción. Eso sí, es muy positivo que las garantías incorporadas para que los clientes afectados por cláusulas abusivas recuperen su dinero sin tener que acudir a tribunales.
Las asociaciones de consumidores van en esta línea. Patricia Suárez, presidenta de Asufin, ha valorado positivamente «esta iniciativa que esperemos que acelere la recuperación del dinero para los consumidores además de desatascar los tribunales que, no lo olvidemos, los pagamos todos los contribuyentes. Sin embargo, vigilaremos el comportamiento de los bancos en su aplicación pues, desgraciadamente, su resistencia a reconocer la mala praxis y devolver el dinero sigue siendo muy elevada».
Esta panda de sinvergüenzas han obligado a muchos ciudadanos a quitarse la vida ante la desesperación y ante sus malas praxis e incluso les han hecho perder la única vivienda que tenían teniendo que venderla para no verse en un desahucio. Las leyes han abandonado a la ciudadanía dejando a estos golfos que obligarán a las personas a firmar documentos contra sus intereses para poder vender y ahora salen con castigarles a devolver lo que hicieron mal desde el principio. Sres del gobierno, empiecen uds por hacerles devolver todo lo que les robaron a los afectados que pagando la deuda con el irph, se vieron cuando quisieron liquidar para vender, pagando un 70% de más, ya que encima del escrito que va contra las leyes, encima se llevaron el doble de lo que prestaron. Es tanto el trabajo que les quedan por hacer, que esto acabará con la vida de muchos antes de ver que se compense nada
las «leyes han abandonado a la ciudadanía. Ahora lo dice? Las leyes emanadas de la sublevación franquista, ni la transacción del 78, fueron para bien del ciudadano. No existían ciudadanos sino siervos. Amenazados. Ahora comenzamos a ver un poco de luz sobre la indecencia de imposiciones de hambre para el Pueblo. Le recuerdo el eslogan : Con ciudadanos no, con Podemos si. Plantamos un buen árbol y, este ja nos esta dando frutos. No,no todos son, ni pueden ser dulces, peros ja podemos ver un futuro con nuestros frutos.