El Gobierno aplazará la aprobación del tope al precio del gas, hasta un Consejo de Ministros extraordinario el próximo viernes. Esta rebaja va a posibilitar la una reducción de la factura de la luz.
Tope al precio del gas
La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, ayer confiaba que este martes “estuviera cerrado el acuerdo con Portugal para topar el precio del gas. Es el combustible que usan las centrales térmicas y que son las que inflan le factura de la luz. La esperada medida abarataría el precio al consumidor.
La Comisión Europea ha dado ya luz verde a poner ese tope al gas. De hecho, la carta de conformidad ha llegado a la mesa del Gobierno que solo está pendiente de cerrar algunas cuestiones técnicas. España comparte la excepción ibérica con Portugal que sí abre la puerta a poner límites de forma inminente a su gas. El gobierno de Antonio Costa no descarta convocar un Consejo de Ministros extraordinario específico para esto.
Carta de conformidad
Bruselas envió a España y Portugal una “carta de conformidad en la que las autoridades comunitarias garantizan que darán su visto bueno definitivo si la normativa final que se apruebe en el Consejo de Ministros se ajusta a lo notificado”, añadieron fuentes diplomáticas.
A última hora de la tarde de este lunes, Bruselas aclaraba que la Comisión Europea todavía no había adoptado ninguna decisión “formal”.
Este comunicado se producía después de que el primer ministro portugués, António Costa, anunciara que ya contaban con el visto bueno para poner este techo máximo al precio del gas. Y que estaban trabajando conjuntamente con España para poder aprobar la legislación este mismo martes.
Una portavoz del Ejecutivo comunitario matizó que lo que los servicios de Competencia de la Comisión Europea “habían trasladado a Madrid y Lisboa era un análisis preliminar”. Todavía había información pendiente, “pero que esperaba que la notificación formal llegase pronto”.
Tope al precio del gas durante 12 meses
España y Portugal llegaron a un acuerdo político con la Comisión Europea el pasado 26 de abril para el tope al precio del gas, en el mercado mayorista de la electricidad. Este es el combustible utilizado por las centrales de ciclo combinado para producir luz, y así aliviar la factura de los consumidores.
La aplicación del tope al precio del gas tendrá una duración de doce meses. Comenzaría con un precio medio del gas de 40 euros/megavatio hora (€/MWh) para estabilizarse en unos 50 €/MWh de media.
La propuesta inicial era que ese límite fuera de 30 €/MWh, con lo que se reduciría aproximadamente al 50 % el importe de las facturas. Para los consumidores con una tarifa indexada al mercado (los de tarifa regulada).
España y Portugal han logrado que la medida se aplique durante doce meses. No sólo hasta final de este año, como se contemplaba en el borrador.
El acuerdo beneficiará al 40% de los consumidores domésticos. Sobre todo, aquellos que tienen tarifa regulada- y hasta al 80% de los industriales. Sus facturas están vinculadas al mercado mayorista de la electricidad, según indicó la ministra.
Excepcionalidad ibérica
España y Portugal anunciaron el pasado 26 de abril que habían llegado a un “acuerdo político” con la Comisión Europea para limitar en el mercado mayorista de la electricidad. de los dos países el precio del gas, utilizado por las centrales de ciclo combinado para producir luz, y así aliviar la factura de los consumidores.
La aplicación del tope tendrá una duración de doce meses y empezará con un precio medio del gas de 40 euros/megavatio hora (€/MWh) para estabilizarse en unos 50 €/MWh de media en todo el periodo.
La propuesta inicial era que ese límite fuera de 30 €/MWh, con lo que se reduciría aproximadamente al 50 % el importe de las facturas de los consumidores con una tarifa indexada al mercado (los de tarifa regulada).
Si bien España y Portugal no han conseguido que Bruselas respalde ese límite, sí que han logrado que la medida se aplique durante doce meses y no solo hasta final de este año, como se contemplaba en el borrador hispano-luso.
El acuerdo beneficiará al 40 % de los consumidores domésticos -aquellos que tienen tarifa regulada- y hasta al 80 % de los industriales, cuyas facturas están vinculadas al mercado mayorista de la electricidad, según avanzó entonces la ministra Ribera.
