El 11 de mayo, cuando comience a levantarse el confinamiento decretado en Francia, 3,7 millones de personas (el 5,7% de la población francesa) habrán estado en contacto con el COVID-19.
Han sido un grupo de investigadores del Instituto Pasteur, Public Health France e Inserm, quienes han presentado hoy un estudio donde se hace una «fotografía» de la situación del país ante el COVID-19.
En este estudio se muestra el impacto positivo que han tenido las medidas de confinamiento decretadas en Francia, sobre todo en lo que a la detención de la propagación del virus se refiere. Según los cálculos de este equipo de investigadores, el número de individuos infectados disminuyó de 3,3 a un 0,5% entre el 17 de marzo.
También explican que, el 11 de marzo, momento en que el confinamiento comenzará a relajarse, el 5,7% de la población habrá estado en contacto con el COVID-19, una cifra muy lejana al 70% que es la cifra que se considera necesaria para alcanzar la «protección colectiva» por inmunidad grupal. Todo ello, teniendo en cuenta que la inmunidad grupal fuera posible, puesto que por el momento, según ha informado recientemente la OMS, no estaría comprobado que fuera así.
