Representantes de CC.OO del centro de DHL Supply Chain en Ontígola (Toledo) han denunciado el despido de dos trabajadores, uno de ellos discapacitado al que le falta un brazo, y al que supuestamente se le rescinde el contrato “por no tener la misma productividad que el resto de sus compañeros”.
Para la representación sindical es intolerable que la empresa “venda” una política de “diversidad” pero “aplique una realidad muy diferente”. Este trabajador fue integrado en la plantilla tras una denuncia de los representantes de CC.OO a la Inspección de Trabajo de Toledo, quien obligó a su contratación, ya que se encontraba en una situación irregular en uno de los centros especiales de contratación de discapacitados, según fuentes del sindicato.
Pasado un tiempo, la compañía ha despedido al empleado aduciendo “baja productividad”, sin tener en cuenta su limitación funcional, añade CC.OO. “Esta situación sorprende todavía más al leer las manifestaciones que efectuó la empresa al lograr la certificación Top Employers 2018, publicado en Empresa Exterior el pasado 1 de febrero de 2018”, alega la organización sindical. En aquella ocasión la empresa argumentó que era un modelo de organización e integración laboral de personas con problemas físicos: “Con respecto a la integración de personas con discapacidad, otro de los objetivos prioritarios dentro de la estrategia de RSC en el ámbito de Recursos Humanos de DHL Supply Chain España, la compañía ha desarrollado un efectivo modelo de contratación, ya sea de forma directa o a través de acuerdos con Centros Especiales de Empleo, superando este colectivo el 12% de la contratación anual de la firma”.
En 2015 DHL, en colaboración con la ONCE y su fundación, realizó en su centro logístico de Quer (Guadalajara) una apuesta por la integración del colectivo en la sección de empaquetado. “Se trata de un proyecto con el que DHL ha dado un gran paso en pro de la integración laboral de personas discapacitadas y en el que cerca de 120 personas con algún grado de minusvalía han pasado a formar parte del equipo de 130 trabajadores que se encarga del empaquetado de los productos, llegando a manipular cada año cerca de 10 millones de unidades”.
En aquella ocasión, María Dolores de Cospedal, entonces presidenta de Castilla-La Mancha, visitó la fábrica de la compañía y se mostró “muy interesada” por el proyecto social. Cospedal destacó la labor “a la hora de concienciar a los gobiernos y al mundo empresarial de la importancia de dicha integración en proyectos que son iguales o más productivos que el resto” y agradeció a DHL haber elegido Guadalajara para poner en marcha la iniciativa.
Por su parte, fuentes de DHL aseguraron que “es crucial que las empresas dejemos de lado prejuicios y seamos activas y responsables en el terreno de la integración laboral de personas discapacitadas. Nuestro equipo de copacking en Quer es un claro ejemplo de valía, productividad y capacidad de trabajo. Son una parte muy importante de nuestra plantilla y clave en la obtención de buenos resultados de cara a la satisfacción del cliente”.
Para CC.OO, con el despido del trabajador que sufre la falta de un brazo se demuestra que “a DHL Supply Chain tan sólo le ha interesado la contratación de discapacitados por el hecho de ser ‘mano de obra barata’, sin importarles sus circunstancias y pensando sólo en la forma de aumentar sus beneficios”. Los representantes de CC.OO se movilizan para exigir el reingreso de los dos trabajadores “injustamente despedidos” y para instar a la empresa a cumplir realmente con la política de diversidad y de responsabilidad social.
A su vez, fuentes de DHL consultadas por Diario16 confirman el despido del trabajador. “A este trabajador no le falta un brazo, tiene una discapacidad reconocida del 44 por ciento”, aseguran las citadas fuentes, que añaden que la huelga de CC.OO ha sido finalmente desconvocada. DHL recuerda que el motivo del despido ha sido “el bajo rendimiento productivo, como en cualquier otro trabajador, no tiene nada que ver con su discapacidad”. Además, la compañía alega que reemplazará ese puesto de trabajo que ha quedado libre, aunque no puede confirmar que sea ocupado por otro discapacitado.
