Mi alegría por vivir en España y en Castilla y León:
Porque hemos sido parte fundamental en la historia de España, pero no nos hemos anclado en ese pasado. Lo sabemos, y nos gusta conocerlo, pero para avanzar. No queremos nada que nos inmovilice.
Porque sabemos el valor de la solidaridad. La hemos dado y…la hemos recibido. Solo importan las personas; el lugar de nacimiento o de residencia es irrelevante.
Porque vivimos en una España libre y si no, miremos a nuestro alrededor. Pero hay quien vive en un país libre pero es rehén de sus fantasías absurdas (quizás este término es muy blando).
Porque conocemos algo tan obvio como que las sociedades son eso, sociedades. Lugares de encuentro donde la unión hace la fuerza.
Porque la vida es para compartirla. Nosotros en Castilla y León querríamos ser más y por eso nos preocupa la pérdida de población, la emigración y los refugiados (mal llamados así pues no han encontrado su refugio)
Porque distinguimos lo importante, las personas, de lo coyuntural, el lugar donde nos paren: cualquier territorio.
Porque en nuestras familias siempre hubo quien atendió a la llamada de los territorios que «alguien» decidió como prioritarios: País Vasco, Cataluña….y lo hicimos para contribuir a su prosperidad. Solos… no habrían podido. No pedimos agradecimiento, aunque siempre sea de bien nacidos.
Por ellos, por nuestros Castellanos y leoneses que viven allí, y por tantos catalanes a los que amamos, no tengo un porqué, tengo una pregunta:
¿De verdad los separatistas sienten, leen, observan y hasta …piensan?
Nos queda la esperanza que lo hagan a partir del día 1.
