La vicepresidenta del Gobierno en funciones, Carmen Calvo, ha señalado que la filtración de los nombres sobre ministros de Unidas Podemos no debería haberse producido: “Hay cosas a las que no se puede dar trascendencia”. También ha señalado en Los Desayunos de TVE que el presidente necesita más tiempo para conformar el nuevo Gobierno, que se conocerá la próxima semana.
Ante la pregunta de si dejará de estar en funciones en los próximos días: La vicepresidenta ha contestado que “eso no me corresponde a mí. El presidente tiene que terminar de cuadrar su Gobierno. Estaré bien donde me esté, porque a mi edad yo estoy bien en donde esté”.
«Soy una persona que hace tiempo que estoy cerca del presidente. […] Estaré ahí para lo que me necesite», asegura Calvo, que ni confirma ni desmiente si seguirá en el nuevo Ejecutivo de Pedro Sánchez, aunque se da por hecho que asumirá una vicepresidencia más política.
Prisas
Sobre por qué tanta prisa en hacer la investidura y ahora se retrasa la composición de Gobierno, Calvo asegura “que la prisa era obvia. A su juicio, “Este Gobierno ha estado tanto tiempo en funciones como en plena competencia. La prisa era razonable y justificadísima”.
“ En cuanto tuviéramos una mayoría en torno a nuestro candidato, lo haríamos”, explica.
Carmen Calvo se muestra optimista sobre la duración de la legislatura e insiste en que “durará los cuatro años habituales”.
Explica también la vicepresidenta en funciones que “le trasladamos a ERC que se abstuviera para que este período de bloqueo acabara, dado que las derechas se habían negado a ayudar a este país. Y les dijimos a ERC que alcanzar un acuerdo de investidura implica poder gobernar, y eso implica los presupuestos”, ha asegurado Calvo.
Preguntada sobre lo que dijo la diputada de ERC Montse Bassa de que le “importaba un comino la gobernabilidad de España”, Calvo asegura que “es el mismo comino que le importa al PP, a Cs y a Vox”. También ha señalado que a nadie le debería sorprender porque ERC son independentistas.
Calvo ha criticado el tono bronco del PP, que, a su juicio, “ha dejado de ser un partido de Estado” y asegura que “es algo inexplicable”
