Partidazo de esos que te aceleran el ritmo cardíaco: Carlos Alcaraz se enfrentaba en la semifinal del Master de Miami al número 10 del mundo
actual: Hubert Hurkacz, una bestia de casi 2 metros de alto que el año pasado ganó este mismo torneo y que con su saque era capaz de conseguir punto tras punto sin que el joven Alcaraz fuese capaz de responderle una veintena de ocasiones.
Para mayor intensidad y problema el español no se encontraba muy bien de forma, estaba agotado, y se apoyaba sobre todo en su serenidad, sangre fría e inteligencia.
Inteligencia. Esa es la base de Carlos Alcaraz, aunque el cuerpo, mi más que verle moverse, le responde como si fuese el mismísimo diablo.
Un partido espectacular que recomendamos a cualquiera vea si se lo perdió en la noche del viernes en España. Y por supuesto recomendamos a todo el mundo que tengan las palomitas preparadas para el domingo en el que Carlos Alcaraz se enfrentará en la final del Masters de Miami al número 6 del mundo: Casper Ruud.
Si consiguiese derrotarle haría historia, pued sería el primer español en ganar en Miami en la categoría masculina. En la femenina sí que hay un nombre español, Arantxa Sánchez Vicario, que consiguió el trofeo nada menos que 7 veces.
Ni siquiera Nsdal lo ha conseguido. Pero Carlos Alcaraz está enorme. Es enorme.
Carlos Alcaraz tiene 18 años. Carlos Alcaraz es capaz de ganar cualquier cosa.
España entera, el mundo entero, estará mirando a Miami. Con fe y hambre de sangre.
El mundo entero quiere ver ganar a Alcaraz. Carlos Alcaraz.
Tigre Tigre
