Banco Santander suele presumir cada año de que es una de las mejores empresas para trabajar. Sin embargo, los testimonios de los empleados o las denuncias realizadas por algunos sindicatos muestran que la realidad es la contraria a la que pretende mostrar la entidad presidida por Ana Patricia Botín.
Uno de los últimos ejemplos de ello es la creación de la figura del «director adjunto» que, según ha denunciado el sindicato UGT en una circular interna a la que Diario16 ha tenido acceso, al Santander «le viene de perlas» una duplicidad funcional en las sucursales desoladas por los continuos ERE o las externalizaciones. Todo ello, además, está agravado por las constantes bajas laborales provocadas por el COVID-19.
En realidad, el cargo de Director Adjunto no es más que un nombramiento absolutamente testimonial, puesto que son vendedores de productos con las mismas o mayores exigencias que otras figuras comerciales, con los mismos o incluso mayores seguimientos de cumplimientos de ventas. Además, son los responsables del rigor documental, operativo, de seguridad o de calidad.
«A la sazón son comodines que valen para todo: cubrir los horarios de apertura, cuadre y cierre para dar soporte a los puestos operativos, lidiar con incidencias de todo tipo, poner orden en el patio, gestionar los conflictos con los clientes que cada vez son menos pacientes (y con razón), atender la caja, los cajeros automáticos y la operativa básica si faltan los Atención al Cliente y Técnicos Comerciales Red, igual que suplir al director cuando no está», afirma UGT en su circular.
Por otro lado, el sindicato señala que los directores adjuntos son una figura «omnipresente e indispensable por ello». No obstante, esa duplicidad de funciones «los tiene al borde de una presión inaguantable y puede crear situaciones que llevan a errores punibles», afirma la circular. Además, los directores adjuntos son responsables de cualquier incidencia, aun sin haberla generado, ya que tienen la función de control de la sucursal. Todo ello, eso sí, sin medios suficientes, ni tiempo material, ni soporte adecuado para poder ejercerla.
Por esta razón, el sindicato pide «reflejar en las encuestas que hace la empresa la realidad del día a día en el Banco con toda su crudeza para que no pueda escudarse en los buenos resultados de sus cuestionarios» y así poder afirmar que son una de las mejores empresas para trabajar.
Regulación verbal de las tardes libres
Los trabajadores de Santander Personal, además, se encontraron con un «regalo de Navidad» en el inicio del 2022: una regulación verbal de sus tardes libres durante el horario de invierno.
Según denunció UGT en otra circular del mes de enero, en cada equipo todos sus componentes librarían por las tardes un día fijo a la semana durante todo el trimestre, «sin poder tener nadie ningún tipo de ajuste por necesidades personales, variando este día «colectivo» de libranzas de tarde en el siguiente trimestre y perdiéndose dicha tarde libre si coincide con un festivo, cuando hasta ahora cada equipo tenía su forma de decidir sobre sus tardes de libranzas, buscando los ajustes personales necesarios para que, de alguna manera, se pudiera conciliar mejor dentro de estos horarios ya complicados», afirmaba la circular.
Este cambio fue notificado de manera verbal por los supervisores de cada equipo «diciendo que ellos no tienen nada que ver, sino que son las instrucciones que vienen desde arriba y que están consensuadas».
A todo lo anterior hay que unir el hecho de que Santander Personal es un departamento totalmente digital y que, por ello, se puede teletrabajar de forma global para evitar los contagios por Covid. Sin embargo, sus responsables han decidido que no va a ser así durante la mañana, pero sí por la tarde
«¿Esta medida del teletrabajo de tarde está realmente pensada para protegernos de la pandemia o para reducir costes, evitando que pasen la comida, tal y como les han recordado en un correo electrónico que les enviaron a todos desde Recursos Humanos el día 3 de enero?», se pregunta UGT. Luego, se tiran fuegos artificiales por los más de 8.000 millones de euros de beneficios que a quien realmente benefician es a los grandes accionistas y al departamento de marketing del banco, jamás a los trabajadores.
Como vamos a poner la realidad de nuestro día a día en las encuestas. Si para empezar cuando nos la envían a nuestro correo personal, las llaman encuestas de compromiso. Nuestra directora de zona nos deja muy claro, que ahí reflejamos el compromiso que tenemos con la empresa , que influye directamente en el bonus del director territorial, que nos deja muy claro que es su amigo ( para que nos andemos con pies de plomo), y que por supuesto no son confidenciales…
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Adiós Sr.Mazas.
Gracias por incluirme en el ERE con esa sonrisa burlesca e irónica. Buen consejo para la compra de horteras corbatas, colonia de bote y zapatitos de primera comunión.
Nos veremos por los pubs de Alicante concretamente por los Virginias y Sesmeros.
Hablarás con tú verborrea barata y hueca.
Soy totalmente feliz ,,que vaya bien por la Secta.