El consistorio madrileño ha puesto en marcha los trámites administrativos para considerar nula la venta de 18 promociones de viviendas –un total de 5300 inmuebles, repartidos entre 1860 viviendas, garajes y locales-, al grupo inmobiliario Fidere.
La acción llevada a cabo el pasado mes de junio, se pudo sacar adelante con el apoyo de los consejeros de Ahora Madrid y PSOE, con la intención de deshacer el acuerdo con la filial del fondo buitre Blackstone.
Los trámites de esta venta fueron acometidos en 2013, cuando Ana Botella, presidenta de la Junta de Gobierno en aquel momento, dio el visto bueno para que se realizara dicha operación, la cual ha sido catalogada como incorrecta por parte de los mandatarios actuales, ya que los inmuebles, deben estar al servicio para cumplir con los requisitos de compromiso e integración con la ciudadanía.
La agrupación local considera defectuoso el proceso, y por ende, ejecutará las acciones correspondientes con el propósito de recuperar ese patrimonio para los madrileños. La teniente de alcalde, la señora Higueras, remarca distintos aspectos que se realizaron de forma fraudulenta como: la no tasación previa, la no fijación del precio, así como la falta de publicidad para su venta.
La variable indispensable para entender tales reclamaciones, se sitúa en el valor de las viviendas. En la actualidad estas tienen un valor cercano a los 600 millones de euros, mientras que su precio de venta en el año 2013 fue de solo 127,5 millones, según han indicado las fuentes consultadas por Diario16.
