Unos documentos desclasificados han demostrado las razones que había de la creación del gobierno militar en 1948 y los motivos para desmantelarlo y revocar las severas restricciones que impuso a los palestinos. Estos registros se hicieron públicos gracias a una campaña dirigida contra los archivos estatales por el Instituto Akevot, que investiga el conflicto israelí-palestino.
Después de la Guerra de Independencia en 1948, el Israel impuso un gobierno militar sobre los palestinos, quienes estuvieron sujetos a la autoridad de un comandante militar que podía limitar su libertad de movimiento, declarar que las comunidades eran zonas cerradas o exigir que los habitantes se fueran y entraran en ciertos lugares solo con su permiso escrito.
Estos documentos describen las formas en que Israel impidió que los palestinos regresaran a las aldeas que habían abandonado en 1948, incluso después de que se levantaran las restricciones sobre ellas. El método principal: plantación densa de árboles dentro y alrededor de esos pueblos para evitar que las aldeas re repoblaran.
En concreto los documentos afirman que «las tierras pertenecientes a las aldeas fueron entregadas al custodio de propiedades de ausentes» y que «la mayoría fueron arrendadas para trabajo (cultivos de campos y olivares) de hogares judíos».
Estas tierras fueron declaradas zonas militares cerradas y, tras destruir todas las estructuras, la tierra fue parcelada, forestada y sujeta a una supervisión adecuada.
El 3 de abril de 1966 se llevó a cabo una reunión en la oficina del ministro de defensa Levi Eshkol, que también era el primer ministro. El representante del servicio de seguridad Shin Bet y de la Policía de Israel afirmó que ya había llegado el momento de levantar el gobierno militar sobre los palestinos.
Con respecto al norte de Israel, se acordó que todas las áreas declaradas en ese momento zonas militares se abrirían después de que se cumplieran las condiciones habituales, arrasar los edificios en las aldeas abandonadas, la forestación, el establecimiento de reservas naturales, cercadas y protegidas. Sin embargo, en lo que respecta a las localidades árabes en el centro de Israel y el Negev, se acordó que las zonas militares cerradas permanecerían vigentes por el momento, con algunas excepciones.
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