El programa ‘Equipo de Investigación’ ha emitido este pasado viernes 19 de noviembre en LaSexta un reportaje en el que analizó las causas del crecimiento de los movimientos de ultraderecha. Especialmente a los que llaman “cachorros ultras”, que es el título que llevó el programa.
Entre las personas a las que se ha entrevistado se encuentra María Isabel Peralta Medina, la chica falangista que admira a Hitler y niega el Holocausto, que se hizo famosa por su discurso antijudío durante un homenaje a la División Azul.
Se da la circunstancia que el programa se ha emitido diez días después de que la Fiscalía de Madrid presentase una denuncia contra la falangista, líder de Bastión Frontal, por la presunta comisión de un delito de odio en relación a unas manifestaciones realizadas el pasado 18 de mayo durante una concentración organizada por Bastión Frotan frente a la embajada de Marruecos.
El padre de la joven neonazi es tertuliano del programa que presentaba Ana Rosa Quintana en Mediaset, se presentó a las elecciones con Falange y acabó de concejal en el PP. Así, podemos comprobar como algunas cadenas dan cobijo al fascismo y como este se va introduciendo en los medios de comunicación en España, con toda la complicidad de estos.
Las actitudes neofascistas se están normalizando en nuestro país, no solo en el discurso de los políticos de la derecha, sino también en los medios de comunicación con permisividad o llevados por conseguir máxima audiencia, como es el caso del programa de la LaSexta. Hay que recordar como el presidente del PP, Pablo Casado, descalificó el encuentro protagonizado por Yolanda Díaz entre otras mujeres líderes políticas tildando el acto de aquelarre. O que Vox la descalificara como “fiesta pijama”.
Cabe preguntarse: ¿Era necesario dar altavoz al discurso filonazi de la joven falangista?
¿Cuántos o cuántas Isabel Peralta estarán dispuestas a decir o hacer cualquier barbaridad homófoba, xenófoba, misógina o de cualquier índole si después como recompensa van a tener unos minutos de gloria en un programa de televisión de máxima audiencia?
No sabemos si la cadena ha valorado esta cuestión. Todo nos hace pensar que no, ya que bien se encargó de dar publicidad a la entrevista en las redes sociales.
Hay a quien no le extraña nada que LaSexta dé voz a los negacionistas del Holocausto entre otras lindezas en prime time, ya que también se le atribuye que en su día ayudara a aupar a Vox.
En los últimos tiempos, las distintas cadenas de televisión están compitiendo en ver quien gira más a la derecha en sus programas de supuestos debates políticos.
En las manos de los televidentes está dar apagón a este peligroso despropósito, dándole en lo que al parecer más duele, en la audiencia de sus programas. Hagamos que estos medios que dan voz a la ultraderecha para supuestamente mejorar su audiencia, como en esta ocasión ha hecho la LaSexta, no solo no crezca en audiencia, sino que esta disminuya.
La permisividad ante el discurso y actitudes neofascistas trae consecuencias nefastas, aprendamos del pasado y no tan remoto.
un pueblo que olvida su historia esta condenado a repetirla y el pueblo español la esta repitiendo
Aplaudo su diatriba contra el fascismo azul, pero hecho de menos que no haga una sola mención al fascismo rojo, (comunismo) tan liberticida y totalitario como el primero. Máxime teniendo en cuenta que tenemos a una ministra en el gobierno que se declara comunista.
Hay que recordar que todos los países donde el comunismo ha llegado al poder; la antigua URSS, Rumanía, Albania, Hungría, la Republica Democrática Alemana, Corea del Norte, Cuba, Camboya, etc, se han convertido en dictaduras tan totalitarias y perversas como la dictadura franquista.
Y el cristianismo, no olvide el cristianismo, la mayor máquina asesina y pederasta de la historia de la humanidad. Y ahí tenemos al Estado no sólo no persiguiendo a sus practicantes sino además dando dinero a la IC y tolerando la presencia de políticos que se declaran cristianos.
Como dice ud. del comunismo, todos los países donde el cristianismo ha llegado al poder se convirtieron en dictaduras más totalitarias y perversas que la estalinista. Afortunadamente hace más de un siglo que el cristianismo ha sido controlado, pero al acecho están para volver a las dictaduras teocráticas medievales, con violaciones a niños ocultadas, autos de fe, torturas, etc, como en la Edad Media. Nadie dude de que si se les diera rienda suelta, sus seguidores irían virando poco a poco hasta convertirse en daesh cristianos
Es que hay algo que creo que algunos analistas no entienden. Las relativamente recientes generaciones de españoles hemos crecido en democracia, y no en una aceptada como algo que está ahí como el sol o la luna y no se le presta mucha atención, sino como algo sacrosanto; hemos sido educados casi en eso que llaman «fundamentalismo democrático», y un pilar de esta democracia burguesa ha sido siempre la libertad de expresión. «No estoy de acurdo con sus ideas pero daría mi vida para que pueda ud. defenderlas», o algo parecido, recuerdo que nos contaban en el colegio que había dicho no sé qué prohombre de las libertades civiles.
Pues bien, que ahora se quiera apagar un discurso ideológico en aras de la democracia nos suena a tongo, a hacer trampas al solitario; y por eso muchos ciudadanos por debajo de los 40, incluso aunque no somos siquiera de derecha liberal, somos más «tolerantes» con discursos que son intolerantes, como el de los fascismos, los independentismos o los socialismos revolucionarios o comunistas.
La ideas se combaten con el debate, con la Historia, la Filosofía, la razón y la cultura. Lo que hay que combatir con represión, incluso armada si fuese necesario, es el intentar poner en práctica ideologías que no estén respaldadas por la mayoría de la población. ¿Pero la libre expresión y el debate? Prohibirlos sería otro acto «fascista» en sí mismo.