Probablemente siempre lo fue, pero desde su muerte hace un año mucho más. Julio Anguita es el referente moral de la izquierda. Curiosamente, recibe halagos también de la derecha, ignorante de que prácticamente cada una de sus intervenciones en el congreso, son la antesala de lo que años después defendería el denostado Pablo Iglesias.
Córdoba le ha dedicado un emotivo homenaje a Julio Anguita con un “eterno” y emocionante aplauso.
Córdoba le debía este homenaje
Dicen que Córdoba le debía este homenaje a quien todos dimos por cordobés aunque naciera en Fuengirola.
Fue el primer alcalde de la ciudad en democracia. Todo un referente del pensamiento y de la izquierda política en todo el país.
En mayo de 2020, tras su fallecimiento, la pandemia no dejó abrir al público la capilla ardiente con sus restos. Esta se instaló en el Salón de Plenos del Ayuntamiento. Desde el exterior, cientos de cordobeses le dedicaron ese día sus aplausos, en ovaciones tan largas como tristes. Las muestras de cariño repitieron varias veces en esa jornada y al día siguiente, hasta que su féretro abandonó el Consistorio.
La viuda ha recordado que “por motivos familiares Julio no nació en Córdoba, sino en Fuengirola (Málaga). A muy temprana edad volvió con sus padres y abuelos a la ciudad donde pasaría el resto de su vida. La ciudad que adoptó como suya y por la que tanto hizo”.
Julio Anguita y Rafael Alberti
Como regidor, “trasladó su vocación de maestro a aulas más amplia”. A las conversaciones entre Julio Anguita y Rafael Alberti. “Su empeño fue la participación ciudadana y la búsqueda del mayor consenso”, ha enfatizado.
La hija, Ana Anguita Parrado ha afirmado emocionada, aque “le gusta imaginar a su padre recorriendo las calles de su querida ciudad, explicando las historias que hay detrás de cada rincón”.
Como anécdota, “en alguna ocasión su padre comentaba que quería comprarse una capa un sombrero y con su bastón perderse en las noches cordobesas disfrutando del ruido de sus fuentes y el olor a dama de noche y azahar”. “Le gustaba esa idea romántica de sí mismo”.
“La timidez que formaba parte de su personalidad y seguramente le hubiese frenado”, de modo que “sustituía el sombrero por su gorra en invierno y la capa por una guayabera blanca en las noches de calor cordobés, que tan mal sobrellevaba”, ha rememorado su hija.
Córdoba era su casa
“Córdoba era su casa, donde nacieron sus tíos, sus cuatro hijos y su nieta, y donde descansa junto a su hijo Julio en el cementerio de La Fuensanta”.
Quedaba por hacerle este reconocimiento póstumo.
Tuit en recuerdo de Anguita
