Era brutal e impresionante la imagen de Lewis Hamilton saliendo de su Mercedes como si fuera UN ANCIANITO LEVANTÁNDOSE DE SU SILLA DE RUEDAS.
Naturalmente Mercedes a través de Hamilton está mandando un claro mensaje a la Federación Internacional de Automovilismo para que modifique el reglamento y poder librarse del BOTA BOTA la cabeza -y la espalda- como una PELOTA.
Pero también está claro que otro piloto con un coche exacto ha conseguido en Azerbaiyán sacarle más de 20 segundos al heptacampeón mundial y al salir del coche estaba fresco como una lechuga.
Estamos ante un clarísimo relevo generacional. Lewis Hamilton está dando sus últimas bocanadas, desgraciadamente para todos los aficionados, y George Russell tiene todo el futuro por delante.
A GEORGE RUSSELL, como hemos dicho en el título de este artículo: NO LE DUELE LA ESPALDA.
(A quien también deben dolerle muchas cosas, el alma y el corazón es sentido metafórico, es tanto a los dos pilotos de Ferrari, en especial Charles Leclerc que podría haber luchado por la victoria, y al gran Checo Pérez; Max era más rápido pero al mismo tiempo da la sensación de que no le han dejado luchar)
Tigre Tigre