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8-M: Reivindicación sin aglomeraciones

Óscar Iglesias Fernández
Óscar Iglesias Fernández
Profesor de Sociología de la UNED
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análisis

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Hace unos días la ministra de Sanidad, Carolina Darias, recomendaba que no se realizaran las marchas, manifestaciones, concentraciones por el Día Internacional de la Mujer, ante la situación que todavía estamos viviendo con la pandemia, y para evitar que se pueda incrementar el número de personas afectadas por el virus.

Tengo que decir que estoy de acuerdo con esta recomendación que la ministra verbalizaba con un claro “NO HA LUGAR”. Concretamente, afirmaba: “Por coherencia de una llamada a la responsabilidad que he realizado, puesto que todavía estamos en situación de riesgo extremo, no ha lugar”, a llevar a cabo actos multitudinarios para conmemorar el Día de la Mujer.

Decir sin tapujos, dentro de la cultura de cuidado y prevención que está siguiendo el gobierno, que este año es mejor no hacer concentraciones, no significa que se deje de reivindicar la igualdad entre mujeres y hombre.

Quien hace este llamamiento, es un gobierno, el de España que el pasado mes de septiembre presentó y fue aprobada por consenso en Naciones Unidad la resolución “Mujeres, niñas y COVID-19″, que se centraba en lanzar un contundente mensaje sobre el compromiso para promover y proteger los derechos y la participación de las mujeres y las niñas en la respuesta a la pandemia.

Que no sea el momento de concentraciones ni de manifestaciones masivas para celebrar este Día de la Mujer es compatible, y podríamos decir que exigible, con levantar la voz, de manera clara, para reivindicar la igualdad entre mujeres y hombre. Y todo ello, sin poner en riesgo la salud ni la seguridad de la ciudadanía.

Como dice Naciones Unidas, las mujeres del mundo desean y merecen un futuro igualitario sin estigma, estereotipos ni violencia; un futuro que sea sostenible, pacífico, con igualdad de derechos y oportunidades para todas las personas. A fin de lograr este objetivo, el mundo necesita mujeres en todas las mesas en las que se tomen decisiones.

  • En 2019, el 16 por ciento de las adolescentes de 15 a 19 años se casaron antes de cumplir los 18 años, frente al 19 por ciento en 2012. A este ritmo, se necesitarán 100 años más para erradicar el matrimonio adolescente.
  • En 27 países, las mujeres casadas están legalmente obligadas a obedecer a sus maridos, y en 16 de ellos estas se enfrentan a sanciones legales si no lo hacen.
  • El 31 por ciento de las mujeres ha sufrido algún tipo de violencia por parte de su pareja. Del total de mujeres víctimas de homicidio en 2012, el 50 por ciento fueron asesinadas por sus parejas o familiares. ONU
  • 31 países no tienen una ley específica sobre acoso sexual.
  • En 67 países, la violencia doméstica no es un delito (en el sentido legal del término) y en 56 países no existe un tribunal especializado ni un procedimiento específico para los casos de violencia doméstica.
  • En 119 de 180 países, el acceso al aborto está sujeto a condiciones.
  • En 88 de 180 países, las mujeres no pueden trabajar en determinadas profesiones en las mismas condiciones que los hombres, y en 24 países necesitan el permiso de sus maridos o tutores legales para trabajar.
  • En 2019 las mujeres representaban el 50 por ciento de la población mundial en edad de trabajar, aunque representaban sólo el 39 por ciento del total de la población activa y el 28 por ciento de los puestos directivos. OIT.
  • A nivel mundial, la brecha salarial entre mujeres y hombres es del 18,8%.
  • En promedio, las mujeres sólo tienen tres cuartas partes de los derechos legales concedidos a los hombres en términos de seguridad económica, crecimiento profesional y conciliación entre la vida laboral y familiar. Banco Mundial.
  • En 102 países no existe legislación que obligue a la igualdad salarial por un trabajo del mismo valor.
  • Menos del 30 por ciento del personal de investigación en todo el mundo son mujeres. UNESCO.
  • El 17,5 por ciento de las personas que trabajan en el sector tecnológico son mujeres. UNESCO.
  • En el conjunto de países que integran el G20, apenas el 7 por ciento de quienes presentan patentes relacionadas con las TIC son mujeres. UNESCO.
  • Las responsables de reclutar en las empresas tecnológicas de Silicon Valley estiman que las candidaturas a puestos técnicos en inteligencia artificial (IA) y ciencia de datos cuentan con un porcentaje de mujeres inferior al 1 por ciento. UNESCO.
  • El 36,2 por ciento de estudiantes en las carreras STEM (por sus siglas en inglés, ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas) y el 29,2 por ciento de las carreras de TIC son mujeres. UNESCO.
  • Las mujeres ocupan solamente el 24 por ciento de los puestos de trabajo en el sector digital. UNESCO.
  • Solo el 6 por ciento de los desarrolladores de software y aplicaciones móviles en todo el mundo son mujeres.
  • En los países de bajos y medianos ingresos, las mujeres tienen un 10 por ciento menos de probabilidades de poseer un teléfono móvil que los hombres, y un 26 por ciento menos de probabilidades que los hombres de utilizar Internet desde un teléfono móvil. La razón principal es el coste asociado a la posesión de un teléfono móvil. UIT
  • En 2020 en todo el mundo, las mujeres representaban el 24,9 por ciento de parlamentarios, el 20,5 por ciento de los portavoces parlamentarios, el 20,5 por ciento de los vicepresidentes, el 6,6 por ciento de los jefes de Estado y el 6,2 por ciento de los jefes de Gobierno. UIP.

Quedan muchas conquistas que realizar. Hagámoslas con seguridad.

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