12/12/2016. ¿Quién terminará a las seis, ministra Báñez?

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Fátima Báñez me resulta un personaje incomprensible. Mariano Rajoy, también, pero Báñez más.

Hoy nos hemos enterado de una noticia irrelevante a la que, sin embargo, algunos medios de comunicación han decidido otorgar la dignidad de titular principal. La cosa es la siguiente: La ministra Báñez ha propuesto en el Congreso que la jornada laboral acabe a las seis de la tarde. Y por si a alguien le cabía duda de su firmeza, ha añadido: “Alguno tiene que dar el primer paso”.

Me mondo.

¿Para quién? ¿Para quién va a acabar la jornada laboral a las seis de la tarde? ¿Para los millones de contratados a tiempo parcial un día sí y seis no? ¿Para los millones de jóvenes y mayores de 45 que ya ni cobran salario por su trabajo? ¿Para quién va a terminar la jornada laboral a las seis de la tarde? ¿Para la legión de camareros que son los únicos contratados si la cosa va bien? ¿Y quién servirá las cenas, ministra? ¿De qué mundo está hablando esta incompresible mujer?

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Primero destrozas, pulverizas el empleo. Luego, aseguras al mundo que la cosa va que chuta. Después, les dices a los que trabajan tres horas cada seis días o 15 horas al día que terminarán a las seis de la tarde. Y no sé, luego te echas un chato de vino y bailas un guaguancó.

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No sabría qué decir, cómo definir a esta mujer. Quizás es la metáfora hecha carne de este tiempo trastornado.

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Mañana seguiremos estupefactos. Aquí mismo, claro.


9/12/2016. “A su patria propicia”

3 COMENTARIOS

  1. Bueno, este es el titular, que enfangó todas las portadas, las cuales en casi su mayoría, obviaron, la implantación de «la mochila austriaca», que devastará aún más el mercado laboral y una especie de tarjeta de beneficencia para tratar los futuros cupones de racionamiento. Todo en el mismo pack. España va superbien, superfuerte, o sea.

  2. No eres la única, Cristina. Yo tampoco he entendido nunca a esta mujer y menos que sea ministra y menos, todavía, que sea la responsable del empleo. Creo que, en efecto, este personaje es la metáfora de la anti-realidad que pregona ella y sus compañeros de gobierno. En un mundo real, todos estos personajes del jiji-jaja no llegarían a ser ni anécdotas. Qué despropósito!

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