Por aquel entonces el humilde (a veces) firmante de este artículo daba clases de guión de cine en la Universidad de Alcalá, y Virginia Castro era una de mis teóricas alumnas; y digo teóricas porque me limitaba a explicar a quienes asistían al curso como se escribía un guión en diez minutos (verdaderamente sólo se necesitan diez minutos) y a continuación les proponía que nos pusiéramos a rodar peliculitas.
In the wake of this… Virginia pasó de alumna a actriz y directora de un cortometraje en menos de dos horas. Y lo hizo muy bien. Me encantó. Hasta el punto de que la dejé grabada en mi corazón; y también en el de mi móvil.
Volví a encontrarla como escritora del Grupo Salvaje años después, y en meses vi como cambiaba de trabajo, de pareja, de aspecto… y cada vez para mejor.
Lo último ha sido su recién descubierta pasión por el maquillaje; hasta el punto que dejó -temporalmente me aseguró- la novela que estaba escribiendo para centrarse en el arte de la magia del latex y el pincel.
Como es natural en ella, es una mujer brillante capaz de combinar personas y situaciones con la soltura de un maestro coctelero, enseguida comenzaron a llamarle de rodajes diversos: cortometrajes, un largo, y una webserie, que era un desafío y un placer para ella, pues en la misma se cruza a zombis y vampiros, zompiros o zombpiros, y el maquillaje es clave para el resultado.
Me mandó el enlace del episodio piloto. Me gustó el manejo de las cámaras, la luz, el ritmo del montaje, y sobre todo el trabajo de Virginia Castro. Me gustó que se pueda hacer cine, yo lo llamo así, con presupuesto cero, pues siempre ha sido mi modo predilecto de trabajar en el mundo del cine (Con lo que hay, así lo bautizamos en la Universidad de Alcalá). Me gustó y me gusta que sea tan fácil difundirlo hoy día: basta un móvil para grabar montar subir e incluso mirar. Y me gusta también poder colocar el enlace en este artículo para Diario16 como prueba de mi apoyo a Virginia, al equipo de rodaje, y todas las personas que ahora mismo están utilizando las ventajas tecnológicas para crear y difundir su obra.
Aplaudo a todos, y animo al lector para que pinche y vea el episodio piloto de CUANDO CAE LA NOCHE. Suerte y que no decaiga. Bajo ningún concepto me perderé el próximo episodio de zombpiros en la web.
Artículo dictado por Javier
Puebla y mecanografiado por el escritor Ángel Arteaga
http://youtu.be/HlONQtDky8g
El primer episodio me encantó, ansioso estoy por ver el segundo.
Como siempre, J.P., haciendo justicia, como dicta su alma.