jueves, 28marzo, 2024
15.9 C
Seville

Rosa Valdeón, la política que salva vidas en el Sáhara

Un control de alcoholemía, perfectamente aireado por sus enemigos políticos en el PP, dejó fuera de juego a la que era vicepresidenta de Castilla y León y la mejor posicionada para sustituir al presidente en los próximos comicios autonómicos

María José Pintor
María José Pintor
Periodista en cuerpo y alma, licenciada en Ciencias de la Información por la Universidad del País Vasco.
- Publicidad -

análisis

- Publicidad -

En un año Rosa Valdeón pasó de ser la futura presidenta de la Junta de Castilla y León para los próximos comicios y vicepresidenta y portavoz de la Junta en su comunidad, a la política pillada en un control de alcoholemia que dio al traste con su vida política. Sus adversarios dentro del PP, liderados por el número tres de los populares Fernando Martínez Maillo, no dudaron en poner el ventilador y en segundos se ocuparon de que sus medios más afines dieran la noticia que, finalmente, dio la vuelta al mundo mediático en España. El pasado fin de semana, como médico salvó la vida de una saharaui.

Hoy, Rosa Valdeón, vuelve del Sáhara, a la que siempre estuvo vinculada, tras salvar la vida de una mujer como médico.

La mujer diabética, aquejada de hipoglucemia, llegó al centro hospitalario mareada y sin que apenas se pudiera sostener por su propio pie, y de inmediato fue atendida por Rosa Valdeón al ser la única doctora que había, ya que el médico se encontraba fuera y sólo había dos enfermeras.

La ex vicepresidenta de la Junta con dos pequeños del Sáhara.

Valdeón, auxiliada por las enfermeras saharauis, colocó a la enferma en una camilla, controló sus constantes vitales y se vio obligada a practicar la reanimación cardiaca, ya que la mujer tenía el pulso muy débil. Cuando se estabilizó tras administrarle insulina, la paciente fue trasladada en una ambulancia al hospital de referencia en los campamentos de refugiados, ubicado en Rabuni, ya que el de Smara carecía de medios para continuar la atención sanitaria a la mujer.

La ex vicepresidenta de la Junta, que tras dimitir volvió a dar positivo en otro control de alcoholemia al salir de casa de unos amigos, quedó defenestrada y con una imagen que poco tiene que ver con la realidad de la que, probablemente, a pesar de los errores que le costaron su carrera y futuro político, sea una de las mujeres que más hubieran podido aportar en nuestro país a la decencia, el compromiso y el buen hacer político.

Rosa Valdeón, que se ha desvinculado de la política y de los medios de comunicación, quita importancia ante Diario16 esta circunstancia de salvar la vida a una Saharaui.

Probablemente para muchos quedará en la mente sus presuntos problemas con el alcohol, pero Diario16 destaca que ha salvado vidas y que incluso, cuando era alcaldesa de Zamora, no dudó en traer a su vida y su hogar un menor saharaui con leucemia que ya forma parte de su familia y al que ha cuidado y tratado como a un hijo más.

Las causas justas han recuperado a una de sus mejores militantes.

- Publicidad -
- Publicidad -

Relacionadas

- Publicidad -
- Publicidad -

4 COMENTARIOS

  1. Al margen de que no comparto su ideología, tengo que reconocer que pocas o ninguna política de este nivel ha parido Castilla y León.
    Además, con su trayectoria vital y su trabajo en el ámbito social, queda de manifiesto su talla como persona, eso es evidente e innegable.
    Pero vivimos en un país de cainitas y las buenas personas tienen poca cabida en política. Los que suben y llegan más lejos es porque han dejado cientos de cadáveres por el camino, que precisamente son las mejores personas. Hasta que esto no cambie, estaremos siempre gobernados por los peores corazones.

  2. Ojalá podamos recuperar a Rosa Valdeón para el servicio público. Sobre todo en Castilla y León, donde la sombra de un corrupto sinvergüenza planea sobre la Junta, para desgracia de los castellanoleoneses y fortuna para sus amigos prevaricadores como el vicealcalde-jefe de la Policía Local.

  3. Rosa Valdeón fue siempre una política comprometida. Pero tuvo la mala suerte de que el presidente de su comunidad pensara en ella para sustituirle, y ahí Maillo y Mañueco fueron a saco contra ella.
    Triste que el delito de los populares de robarnos a una política honesta no tenga, tampoco en este caso, penas legales.

DEJA UNA RESPUESTA

Comentario
Introduce tu nombre

- Publicidad -
- Publicidad -
- Publicidad -
- Publicidad -

últimos artículos

- Publicidad -
- Publicidad -

lo + leído

- Publicidad -

lo + leído