Puigdemont: “El 1 de Octubre no fue simbólico”

El ex presidente de la Generalitat de Cataluña Carles Puigdemont ha asegurado que el referéndum del pasado 1 de Octubre, declarado ilegal por la justicia española, “no fue simbólico”. Desde Bruselas, el líder de Junts Per Catalunya asegura en la tercera parte de la entrevista en exclusiva concedida a Diario16 que aquella jornada electoral los independentistas movilizaron a “más de dos millones y medio de personas que luego el 21 de diciembre ratificaron”.

“No voy a entrar jamás en ningún maletero”

En la primera entrevista concedida a un medio español desde su traslado a la capital belga, el presidente catalán cesado por el Gobierno español a través del artículo 155 de la Constitución Española recuerda que aquel 1de Octubre más de dos millones y medio de personas se movilizaron para votar. Puigdemont subraya que, posteriormente, el 21 de diciembre, en las autonómicas convocadas ya con el artículo 155 en vigor y “en unas condiciones aún peores con gente en la cárcel, en el exilio, etc, etc, y con un derroche de millones de euros para Ciudadanos, Partido Popular, fuimos a votar más aún que el 1 de Octubre”. Y ratifica que “claro que no es simbólico, es real”, en referencia a aquel referéndum que otros dirigentes independentistas con causas penales abiertas en la justicia española han tildado de “simbólico” para evitar la prisión por delitos de rebelión y sedición.

“Nada es inmutable, por tanto, nada es definitivo”

Puigdemont, muy crítico con la monarquía y la salud de la democracia en general actualmente vigente en España, asegura a la directora de Opinión de Diario16, Beatriz Talegón, que “no hay botón que hace repúblicas, a lo mejor sí hay botones que hacen monarquías. Es un proceso colectivo y largo”.

Sobre las especulaciones que se han mantenido en las últimas semanas sobre su regreso a España, el expresidente catalán lo ha dejado claro dirigiéndose directamente al ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido: “No voy a entrar jamás en ningún maletero ni he planteado jamás entrar en ningún maletero. Creo que lo saben y se podrían haber ahorrado los recursos públicos de las fuerzas y cuerpos de seguridad buscando ridículamente en los maleteros y destinar esos recursos a dar pensiones”.

“No hay botón que hace repúblicas, a lo mejor sí hay botones que hacen monarquías. Es un proceso colectivo y largo”

Puigdemont también rechaza la acusación de que sea un ciudadano fugado. “No me fugué de nada. Vine aquí a cara descubierta, con toda la libertad de movimientos porque creo en la Europa de libre circulación, y por tanto no tenía que dar explicaciones a nadie”. Asegura que llegó a la capital belga de forma “legal”. “Cuando me enteré de que había una Euroorden me presenté a la justicia belga. Siempre he dado la cara y pedí declarar por videoconferencia, que fue rechazada”.

En el apartado en que aborda la cuestión nacional, el líder independentista catalán afirma contundente: “Todas las patrias son inventadas, todas las naciones son inventadas. Es lógico, no hay un derecho divino que te dé derecho a ti y a ti no para que seas una nación o un Estado”. Y a continuación se pregunta: “¿Por qué tenemos que tener la nación que soñaron nuestros tatarabuelos por aquel momento? ¿por qué es como una religión eso de la unidad”. Puigdemont añade que “nada es inmutable, por tanto, nada es definitivo”.

“Cuando me enteré de que había una Euroorden me presenté a la justicia belga. Siempre he dado la cara”

Pese a todo, muestra en todo momento un tono conciliador y sigue tendiendo la mano al Gobierno español para resolver lo que considera un “problema constitucional político”, aunque lamenta que el ejecutivo de Mariano Rajoy nunca le haya dado la oportunidad de iniciar un diálogo constructivo en este sentido o una negociación política de igual a igual. “Nada es definitivo, claro que podemos entendernos siempre”, añade.

Puigdemont asegura que ha llegado a quedarse “afónico” de repetir que “fecha de referéndum no hay ninguna si quieren”, con la idea de que se inicie una negociación al respecto que desbloquee la situación. “Tenemos derecho de ir a la mesa de negociación proponiendo lo que hemos propuesto a nuestros electores, no es ningún acto criminal pedir la independencia de Cataluña”. “Si nos reconocemos como actores de un problema político nuestra obligación es dialogar”, añade el ex presidente catalán.