El terrorismo de ETA siempre ha formado parte del discurso del Partido Popular, y parece que, aunque ya hace años que la banda terrorista, durante el mandato de José Luis Rodríguez Zapatero, dejó de existir de facto, ahora, el eurodiputado vasco, Carlos Iturgaiz, ha remitido una carta al ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, en la que le recuerda que si la decisión de acercar y conceder el tercer grado a los etarras Olga Sanz Martín y Javier Moreno Ramajo ha venido motivada como consecuencia de que éstos hayan pedido perdón a sus víctimas, este supuesto no se ha cumplido en su persona, a la que dichos etarras trataron de asesinar.
En la breve carta que ayer mismo envió al ministro el que fuera Presidente del Partido Popular del País Vasco dice leer “con sorpresa” el que los acusados de tratar de asesinarle cuando ostentaba dicho cargo van a ser acercados al País Vasco y que, entre otras razones, progresarán al tercer grado “por haber pedido perdón a sus víctimas”.
“En calidad de tal, permítame recordarle e informarle a los efectos oportunos que ninguno de ellos se ha puesto en contacto conmigo a tal efecto”.
Al hilo de la carta remitida, Carlos Iturgaiz apunta que lo conocido ayer se enmarca “dentro de un proceso para el debilitamiento de la lucha contra ETA que inició Rodríguez Zapatero que pasa por premiar a los verdugos y castigar a las víctimas, que tiene como otro gesto el no recurrir la Ley de abusos policiales promovida por el Gobierno Vasco, y que todo ello forma parte del peaje que este gobierno debe pagar a sus apoyos nacionalistas e independentistas”.
Resulta paradójico, como mínimo, que el PP hable de “debilitamiento de la lucha contra ETA que inició Zapatero” cuando fue precisamente con el expresidente socialista cuando se acabó con la banda terrorista.
Estos cretinos siempre necesitan un malo para aparecer como buenos y recurren a lo que sea. Pueden incluir también las huestes de Napoleón y así como que es más terrible todo.