El Consejo de Ministros anterior a la semana santa aplazó la prórroga automática del Plan de Activación para el Empleo que tenía previsto aprobar, y retomará las negociaciones con los sindicatos.
El gobierno aplaza la aprobación del Plan de Activación para el Empleo (PAE) – que incluye ayudas de 426 euros para parados de larga duración con cargas familiares – El propio Ejecutivo reconocía que la reactivación del plan por el empleo, no había alcanzado los objetivos que previamente se habían marcado.
Para Mari Carmen Barrera después de la última reunión antes de Semana Santa, los resultados de este plan han sido muy insatisfactorios, “Puesto que de los 400.000 beneficiarios, sólo se puede hablar de la realización de 25.000 contrato a desempleados”.
UGT y CCOO retomarán las negociaciones para que la aprobación del PAE no sea una prórroga del anterior, y que sirva para que puedan acceder al programa todos los posibles beneficiarios: “de madera que se eliminen todos los requisitos, la mayoría son administrativistas, como por ejemplo, el estar inscrito en la oficina de empleo, o el inscribirse en ofertas de empleo de manera online. Entendemos que son colectivos muy damnificados, y próximos a la exclusión social” como ya nos indicó en una reunión anterior Mari Carmen Barrera Secretaria Empleo y Seguridad Social de UGT.
En la actualidad el PAE tiene requisitos que en determinadas cuestiones solo sirven para que el SERPE rechace posibles beneficiarios. Los sindicatos quieren que el PAE llegue a cuantos más beneficiarios mejor.
UGT quiere que en el diálogo social se haga una futura reconfiguración del PAE, para que realmente sea un plan de políticas de reinserción de empleo como originariamente era. El PAE, actualmente no está funcionando en esa línea.
Las cifras que ofrece UGT sobre el PAE son reveladoras: solo 25.000 han podido ser recolocados, lo que supone apenas un 6,5% de esos 400.000 potenciales destinatarios y uno de cada cinco inscritos (el 17,8%). el Gobierno del PP en 2015 gastó apenas 160 millones (19%) de los 850 millones presupuestados, dejando sin ejecutar 690 millones.
