Las quejas de los Agentes Medioambientales en España   son implacables hacia el ministro Juan Ignacio Zoido, que subrayan “hasta la fecha nada se ha hecho para implementar las condiciones de seguridad para proteger la vida de los agentes forestales y medioambientales en España, ni por parte del Ministerio del Interior, ni por parte de las Comunidades Autónomas”, pese a “las buenas palabras del propio Ministro del Interior”, quien aseguró que “hay que adoptar medidas encaminadas a mejorar la seguridad de los Agentes Medioambientales y en ello vamos a trabajar”, sin soluciones concretas hasta la fecha, según expone Rubén Cabrero, presidente de AEAFMA               (Asociación Española de Agentes Forestales y Medioambientales) en declaraciones a Diario 16. Este colectivo no descarta realizar próximamente una concentración ante el Ministerio del Interior para que desbloquee la actual situación, antes de que se vuelvan a lamentar la pérdida de vidas humanas, señalan estos Agentes.

Un duro momento para el colectivo de agentes forestales y medioambientales españoles, fue el asesinato de dos Agentes Rurales el pasado mes de enero en Lleida, motivo por el que AEAFMA mantuvo una reunión con el Ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, y su Director de Gabinete, Francisco Luis Pérez Guerrero. Las reivindicaciones planteadas desde hace años por AEAFMA, y según expone su presidente Cabrero, “son desoídas una y otra vez por este Ministerio”, conllevan a que desde este colectivo se siga luchando por sus derechos, y mejoras de las condiciones laborales.

En concreto, AEAFMA continúa solicitando “la Modificación del Reglamento General de Vehículos para que los vehículos conducidos por los Agentes Forestales tengan la consideración legan de “vehículo de policía” para portar los mismos elementos de identificación que el resto de colectivos de policía, entre otros, los luminosos de prioridad V-1 de color azul”.

Modificación del Reglamento de Armas para que los Agentes Forestales tengan acceso a la licencia de armas Tipo A a través de su carnet profesional” destacando desde AEAFMA que este colectivo ha portado armas durante la mayor parte de su historia, habiéndose retirado éstas de forma progresiva, pese a que el número de infractores y delincuentes medioambientales ha ido en aumento.

Inclusión de los Agentes Forestales en la Ley de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad como una Policía especializada en Medio Ambiente, aumentando así su protección ante agresiones y poniendo a su alcance los mismo medios con los que cuentan el resto de policías”, es otro punto vital para los Agentes Forestales, y promover convenios con las Comunidades Autónomas que permitan a estos Agentes realizar actividades de formación conjuntas con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, apuntando a la Academia de la Policía Nacional de Ávila, como un lugar idóneo.

Los Agentes Forestales se quejan de que en la actualidad siguen patrullando y enfrentándose a infractores y delincuentes con una libreta y un bolígrafo. Estos profesionales declaran que las agresiones no cesan, recordando también la agresión hace unas semanas a Agente Medioambiental en la Región de Murcia, que movilizado por una quema ilegal de residuos, fue agredido por varias personas al llegar al lugar de los hechos.

Incendio en Doñana

El presidente de AEAFMA, Rubén Cabrero, avanza para Diario 16, que “las causas de este incendio están aún por determinar, descartando causa naturales, y adjudicando esta desgracia a la mano del hombre”, y asegura que “las Brigadas de Investigación de Incendios del Cuerpo de Agentes de Medio Ambiente de Andalucía se encuentran ya trabajando sobre el terreno, al objeto de determinar la causa y causante del suceso, en caso de que lo hubiere, del incendio que se desató el pasado sábado por la noche en La Peñuela deMoguer”, localidad situada a escasos cinco kilómetros del Espacio Natural de Doñana. Diferentes efectivos se han ido sumando en estas agónicas horas, para trabajar en la extinción de este incendio forestal, que cuenta con miembros de la UME, 200 efectivos del Plan Infoca, 15 autobombas, siete medios aéreos, y maquinaria pesada. 

Los efectivos que atajan este incendio forestal han logrado controlar las llamas del frente activo del Parador de Mazagón y el Camping Doñana, además de evacuar cerca de 2.000 personas en las últimas horas, en un incendio del que hay sospechas de que el origen puede haber sido provocado por la mano del hombre.

Según explica Rubén Cabrero, en declaraciones a Diario 16, “desde la noche de sábado, se está desarrollando en la provincia de Huelva un demoledor incendio que a estas horas continúa estando fuera de capacidad de extinción. Los fuertes vientos de la zona están generando un avance muy fuerte del incendio. Las grandes alturas de llama, que superan en muchos casos los 30 metros, así como la densa columna de humo generada por la combustión del propio incendio, dificultan sobremanera la actuación de los medios. La vegetación que se está quemando está formada principalmente por Pino piñonero, especie altamente inflamable por su contenido en resinas”.

Por estas grandes dificultades, insiste el presidente de AEAFMA, en la importancia de “centrar los esfuerzos en evitar cualquier accidente o pérdida humana y limitar en lo posible los daños al Parque Nacional de
Doñana fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1994, siendo uno de los activos naturales más importantes de nuestro país”.

Incendio de Portugal 

Recordando el reciente y desolador incendio forestal acaecido en Portugal, Cabrero comunica desde la Asociación Española de Agentes Forestales y Medioambientales, sus condolencias “lamentando profundamente el fallecimiento de más de 60 personas en el incendio de Portugal”, y sostiene que “las altas temperaturas que venimos sufriendo en la península, por encima de los 40 grados, unidas a una humedad relativa, -contenido de vapor de agua en el aire-, hacen que el riesgo de incendios sea muy elevado”.

En el incendio de Portugal todos los factores que intervienen en los incendios forestales se alinearon en contra. Temperaturas muy elevadas, bajas humedades, un combustible altamente inflamable formado por pinos y eucaliptos y una orografía muy irregular, generó un incendio de dimensiones colosales y comportamiento “explosivo” con velocidades de avance que lo hicieron incontrolable”, aclara Rubén Cabrero, que indica que “este tipo de incendios llegan a estar “fuera de capacidad de extinción”, ya que el agua de los medios aéreos llega a evaporarse antes de tocar siquiera la vegetación y los medios terrestres no pueden acercarse a las llamas por el intenso calor y humo denso que existen en la zona, por lo que la actuación se limita a actuar en flancos y cola con el objetivo de minimizar los daños”.

A las causas de este incendio y los contratiempos descritos desde AEAFMA, finalmente habría que sumar en el caso del incendio de Portugal que este país, no posee un dispositivo contra incendios bien estructurado y dotado de medios, ya que gran cantidad de sus integrantes son voluntarios de Protección Civil, llevó a una situación incontrolable que derivó en la mayor tragedia de su historia en lo que a incendios forestales se refiere, indicó en sus conclusiones Rubén Cabrero.

Los “CSI del Monte”

Más de 6000 Agentes Forestales velarán por nuestros bosques durante la Época de Alto Riesgo por Incendios Forestales en turnos de guardia cubriendo las 24 horas del día. Este colectivo interviene en todas las fases de un incendio forestal: desde la colaboración en el diseño de los trabajos de prevención, pasando por la Coordinación y Dirección de los medios de extinción hasta la investigación integral del suceso.

“Dentro de estas funciones, todas de especial relevancia, destacan los agentes dedicados a la Investigación de Incendios Forestales, conocidos como los “CSI del Monte”, detalla el presidente de AEAFMA que explica “su ardua tarea consiste en investigar el 100% de incendios forestales que tienen lugar en nuestro país. Para ello, utilizan el Método de las Evidencias Físicas, consistente en recorrer el incendio hacia atrás en base a los vestigios que éste deja durante su avance en vegetación, piedras, o cualquier objeto que se encuentre en la superficie quemada”.

Mediante este procedimiento y unido a la toma de manifestaciones a los posibles testigos de los hechos, estos agentes llegan a esclarecer más del 90% de los incendios forestales. El resultado de la investigación es trasladado a la Autoridad Judicial competente a través del correspondiente atestado policial en aquellos casos de incendios derivados de la mano del hombre que pudiesen tener responsabilidad penal atribuible.

“El trabajo de las BIIF es calve en materia de Incendios Forestales, no sólo para depurar las responsabilidades que correspondan, sino para adoptar medidas que nos permitan reducir el número de incendios en nuestro país”, apostilla Cabrero desde AEAFMA.

Campaña de Alto Riesgo en Incendios Forestales en España

Nos encontramos ante un verano que se presenta como complicado y “largo”, ya que la escasez de lluvias y las altas temperaturas han generado que nos encontremos en niveles de desecación del combustible que otros años nos encontraríamos en el mes de julio. Según argumenta el presidente de AEAFMA, “llevamos un mes de adelanto con respecto a años anteriores. -ya en el mes de mayo se estaban cosechando cultivos agrícolas, cuando esta actividad suele comenzar en junio-, y aunque aún no se han desarrollado en España incendios de grandes dimensiones este verano,- pendientes del incendio en Huelva-, el número de conatos en algunas Comunidades es notablemente superior al de años anteriores en estas mismas fechas, lo que hace pensar que va a ser un verano de abundante trabajo para los medios de extinción”.

En nuestro país, detrás del 95% de los incendios forestales se encuentra la mano del hombre. Así lo determinan las estadísticas obtenidas por las Brigadas de Investigación de Incendios Forestales, integradas por Agentes Forestales. El 5% restante se debe a rayos, generalmente provocados por tormentas secas.

Dentro de ese 95% de incendios forestales, las causas más abundantes son los intencionados y las negligencias. Los primeros son provocados para la obtención de un fin,-puede ser económico o de otro tipo, como las venganzas-, mientras que las negligencias, no existe voluntad de provocar el incendio, sino por comportamiento incorrectos: arrojar una colilla desde el coche, usar radiales o equipos de soldar el monte, realización de barbacoas.

Los Agentes Forestales señalan que las negligencias son la principal de causa de incendios forestales en muchas Comunidades Autónomas. Para combatir este tipo de incendios es muy importante la concienciación ciudadana respecto a la limitación del uso del fuego o de maquinaria durante los meses de máximo riesgo de incendios forestales.

El principal “talón de Aquiles” de nuestro país es la falta de inversión en prevención. Se pretende ahorrar económicamente no realizando apenas tratamientos selvícolas (podas y desbroces) en los bosques y lo que se consigue realmente es que los incendios que se generan sean más grandes y los costes de extinción mucho más elevados que la inversión en prevención. “España debe invertir más en prevención y mantener los bosques limpios, bien estructurados y con una adecuada red de caminos y cortafuegos que permita a los profesionales de la extinción llegar con la mayor premura al lugar del suceso. Los primeros instantes son claves”, argumenta Cabrero, que recomienda “atender a las estadísticas obtenidas por las Brigadas de Investigación de Incendios Forestales (BIIF), ya que sólo conociendo las causas que originan los incendios forestales podremos adoptar medidas encaminadas a erradicarlos”.

2 COMENTARIOS

  1. La Investigación de incendios, una herramienta fundamental para luchar contra esta lacra, está a punto de saltar por los aires en Asturias, si nadie lo remedia. El gobierno «susanista» que se ha enquistado en esa región, pretende de manera INMEDIATA hacer depender a los agentes forestales que investigan incendios de el ente autónomo SEPA para poder controlar y manejar las investigaciones a su antojo, mermando de la independencia que estos equipos necesitan. Ya en su día WWF-España se hizo eco de esta situación.

  2. Menuda panda, nada, darle pistolas y que se pongan a jugar a pistoleros. Poca vergüenza tienen el 90%. Mucho pedir y poco que dar. Ese 90% que se ponga a estudiar el C.P., L.E.C, etc, etc. Más de 25 años viendo despropósitos de esta gente en diferentes CCAA.

DEJA UNA RESPUESTA

Comentario
Introduce tu nombre