La tragedia vuelve a repetirse en el Mediterráneo. Un total de once inmigrantes han muerto y más de 200 se encuentran desaparecidos -con altas probabilidades de haber perdido la vida-como consecuencia del naufragio de dos embarcaciones en las que navegaban este fin de semana por el mar Mediterráneo en su intento de alcanzar Europa desde las costas de Libia, según las agencias internacionales.
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los refugiados (ACNUR) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) han dado cuenta de esta nueva desgracia en base a los relatos de supervivientes.
El primer naufragio se produjo el viernes por la mañana cuando una lancha neumática que partió de Libia con 132 personas a bordo naufragó horas después. Alrededor de 50 de estas personas fueron rescatadas por buque de contenedores danés ‘Alexander Maersk’ y desembarcados el domingo en Pozzallo, en el sur de Sicilia donde pudieron recogerse sus testimonios. Según el relato de los supervivientes, había mujeres y niños entre los desaparecidos.
El lunes, diez mujeres y un niño han sido descubiertos sin vida en una playa de Zawiya, a 50 kilómetros al oeste de Trípoli, ha informado un responsable de la Cruz Roja libia. El domingo, siete personas inmigrantes -una mujer y seis hombres- fueron socorridos por pescadores y guardacostas libios a frente a la localidad libia de Zawiya. Estos supervivientes han relatado que partieron en una barca con 120 persons a bordo, entre ellas una treintena de mujeres y nueve menores.
A lo largo del fin de semana, 6.000 inmigrantes han sido socorridos en las aguas internacionales frente a la costa libia y conducidos a Italia y varios centenares, localizados todavía en aguas libios y reconducidps al país norteafricano.
Excluyendo a las personas que podrían haber muerto ahogadas este fin de semana, ACNUR cifra en más de 1.150 personas los desparecidos y muertos este año cuando intentaban alcanzar Europa cruzando el mar Mediterráneo desde el norte de África, según Reuter.
