Ángel María Villar, y su hijo Gorka, irán, de momento a prisión, después de que la Fiscalía Anticorrupción haya pedido el ingreso en prisión provisional y sin fianza para el presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Ángel María Villar, y su hijo Gorka por un posible perjuicio de al menos de 45 millones de euros a las arcas del organismo.

Las fiscales Inmaculada Violán y Esther González han pedido al juez Santiago Pedraz que envíe a prisión a ambos tras tomarles declaración desde las 10.00 hasta las 13.30 horas, y, tras la celebración de la correspondiente vistilla para la adopción de medidas cautelares, el juez de la Audiencia Nacional decidirá si decreta la prisión, han informado a Efe fuentes jurídicas.

El Ministerio Público ha solicitado esta medida cautelar, la más grave de todas, tras la comparecencia de los imputados ante el juez. El magistrado también interroga este jueves a los otros dos arrestados en esta operación: el vicepresidente de la RFEF Juan Padrón; y para el secretario de la Federación Tinerfeña de Fútbol, Ramón Hernández Boussou, implicados en el caso.

Los investigadores tratan de demostrar que los cuatro imputados desviaron dinero procedentes del fútbol español, a cuyo frente lleva Villar 29 años, a sociedades privadas. La Guardia Civil busca probar que esta corrupción, que se llevó a cabo con comisiones cobradas por amistosos de la selección o mediante mordidas por contratos, sucedió de forma continuada a lo largo de años y de forma generalizada también en las federaciones territoriales, como en las de la Comunidad Valenciana y Ceuta, entre otras.

Ángel María Villar ha llegado a la Audiencia Nacional para prestar declaración ante el magistrado que instruye el sumario, Santiago Pedraz, en torno a las 08.00 de la mañana. Mientras que él lo ha hecho en solitario, los otros tres detenidos han llegado en un furgón de la Guardia Civil minutos más tarde. Villar ha pasado sus primeras 48 horas de detención en las dependencias policiales del municipio madrileño de Las Rozas mientras que el resto lo ha hecho en los calabozos de Tres Cantos, informa Efe. Gorka Villar y su padre, Ángel María, fueron los primeros en declarar, en unos interrogatorios que comenzaron a las diez.

A los cuatro investigados se les imputan los delitos de administración desleal, apropiación indebida, corrupción entre particulares y falsedad documental. En cuanto a Villar, también vicepresidente del Consejo de la FIFA y del Comité Ejecutivo de la Unión de Asociaciones Europeas de Fútbol (UEFA), se le investiga porque presuntamente pudo haber impulsado la celebración de partidos entre la Selección Española de Fútbol y otras selecciones con el fin de obtener contraprestaciones económicas para su hijo, abogado especializado en derecho deportivo. Villar tenía sospechas de que su teléfono estaba intervenido.

DEJA UNA RESPUESTA

Comentario
Introduce tu nombre