Las caras más largas que ayer se vieron en el Parlament catalán, incluso antes de que comenzara el pleno con la intervención de Puigdemont, fueron las de los representantes de la CUP.
De hecho, aunque no se ha confirmado oficialmente, a ellos se debió el retraso de un ahora, según lo previsto, en la intervención del president de Cataluña.
Ni les gustó el discurso de Puigdemont a la CUP, ni está dispuesta la coalición a perder su cuota de poder y protagonismo en la crisis soberanista.
De hecho, el movimiento más radical de la CUP, Arran, ha dado a conocer a través de su cuenta de Twitter su indignación por la decisión del president de la Generalitat.
”Estamos asistiendo a una traición inadmisible. Hoy @KRLS (Puigdemont) frena el mandato popular claro y rotundo del referéndum”, denunciaban en un primer tuit y continuaban: “En el Passeig de Sant Joan se respira rabia e indignación. Millones de personas heridas, para eso? No tenéis vergüenza”. Para terminar esta serie de mensajes han concluido: “Ahora más que nunca es preciso que continuemos organizadas para exigir la aplicación inmediata de la independencia. Que la prudencia no nos haga traidores”.
La diputada de la CUP, Anna Gabriel, ha advertido en su intervención ante el Parlament de que «lo que tocaba hacer era proclamar solemnemente la república catalana« y que tal vez «se ha periddo una ocasión» porque «el único instrumento eficaz» y el «único medio de negociación posible con el Estado» es la República catalana.
Gabriel ha avisado de que inician «una etapa de lucha» porque ni ellos «ni muchas personas» piensan renunciar a esa república y porque «no se pueden suspender los efectos de la voluntad de más de 2 millones de personas», en referencia a los resultados del 1-O.
«diálogo», en catalán:
https://twitter.com/TheCodorniz/status/917986161863417856
lo lleva claro la tipa
Les han dado por el CUP…