El artículo 155 es una realidad tras el Consejo de Ministros que de forma extraordinaria se está celebrando para cerrar la crisis soberanista que se vive en Cataluña. Así, el Estado, como en breve anunciará Mariano Rajoy, según el acuerdo alcanzado con PSOE y Ciudadanos, asumirá el control de Hacienda, Mossos, informática y los servicios públicos, como la propia TV3. Un mazazo para los independentistas que hoy contestarán en la manifestación que tiene lugar esta tarde en Barcelona para exigir la liberación de Jordi Sánchez y Jordi Cuixat.
El Gobierno mantiene las medidas que incluirá la aplicación del artículo 155 de la Constitución como el secreto mejor guardado, en espera de acabar de cerrar el acuerdo con el PSOE, con una conversación entre Mariano Rajoy y Pedro Sánchez antes del Consejo de Ministros extraordinario que se celebrará hoy.
Sin embargo, tanto Rajoy desde Bruselas, como el ministro portavoz, Íñigo Méndez de Vigo, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros en Madrid, dieron pistas de por dónde pueden ir las medidas, al establecer las prioridades y los objetivos. La prioridad es “recuperar la legalidad constitucional y estatutaria”, pero inmediatamente después, o en paralelo, restaurar la convivencia en Cataluña, y preservar los derechos de los catalanes: la libertad, la seguridad y la pluralidad.
Otros principios que inspiran las medidas son implantar la neutralidad institucional –ya que, a juicio de Méndez de Vigo, ahora las instituciones están “al servicio de los soberanistas”–; garantizar el mantenimiento de los servicios públicos esenciales, y lograr la recuperación económica.Sin embargo, tanto Rajoy desde Bruselas, como el ministro portavoz, Íñigo Méndez de Vigo, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros en Madrid, dieron pistas de por dónde pueden ir las medidas, al establecer las prioridades y los objetivos. La prioridad es “recuperar la legalidad constitucional y estatutaria”, pero inmediatamente después, o en paralelo, restaurar la convivencia en Catalunya, y preservar los derechos de los catalanes: la libertad, la seguridad y la pluralidad.
Otros principios que inspiran las medidas son implantar la neutralidad institucional –ya que, a juicio de Méndez de Vigo, ahora las instituciones están “al servicio de los soberanistas”–; garantizar el mantenimiento de los servicios públicos esenciales, y lograr la recuperación económica.