viernes, 29marzo, 2024
10.9 C
Seville

Entrevista a Héctor Fáver y Eduard Fernández

Con motivo del estreno del documental Lesa Humanitat, el director y el narrador nos cuentan un poco más sobre el proyecto

- Publicidad -

análisis

- Publicidad -

El cineasta Héctor nos responde a una serie de preguntas sobre este documental sobre las víctimas del franquismo.

 

¿Cómo te decidiste a hacer un documental sobre las víctimas del Franquismo?

Por dos cosas. Por un lado tenía la intención de aportar un granito de arena a las personas y asociaciones que luchan contra la impunidad de los crímenes del franquismo. A raíz del trabajo de mi amigo Carlos Slepoy y otras personas me motivé a llevar a cabo este proyecto. Carlos Slepoy, abogado muy reconocido, falleció hace unos meses pero había trabajado muchísimo por el tema de la querella argentina. Al igual que costó que la justicia argentina juzgara sus propios fallos durante la dictadura y se pidió ayuda a jueces españoles, esto mismo está ocurriendo en España y se está pidiendo ayuda a jueces argentinos. Como el estado español no tiene ningún tipo de intención, no solamente de que se investiguen los crímenes sino que tampoco quiere que se investiguen fuera, pues a través de Carlos Slepoy y otras personas se ha conseguido que la justicia argentina extradite y juzgue a criminales del estado español. Cosa que no es fácil porque el estado español limita absolutamente. Ver trabajar a Carlos y a otras personas, pues me motivé a aportar mi propio granito de arena y hacer un documental que pueda aportar a estas personas una ayuda. Por otro lado quería, a un nivel más personal, cerrar una trilogía en relación a mis anteriores películas La memoria del agua, una película sobre el holocausto, e Invocación, que trata sobre los desaparecidos en Argentina. Lesa Humanitat no habla solamente de la feroz dictadura franquista y posterior impunidad de esos crímenes en democracia sino que también habla de la vinculación del franquismo con los nazis, el franquismo con las dictaduras latinoamericanas, del franquismo con la transición y como todo de alguna manera se interrelaciona.

 

¿Con qué dificultades te has encontrado en el rodaje?

Como dificultad no, simplemente que es una película con muy pocos medios, pero ya sabíamos que iba a ser así. Ya te puedes imaginar que una película así no ha tenido subvención ninguna, no ha tenido ayuda de ninguna televisión, entonces sabíamos que íbamos a trabajar de una manera muy limitada a nivel de presupuesto, pero lo hemos asumido y hemos puesto mucha fuerza. Gracias al trabajo de muchas personas que han aportado su talento y sin prácticamente cobrar nada o casi nada, entre todo el esfuerzo de mucha gente hemos conseguido que la película pueda terminarse. También gracias a dos productores que han luchado por esta película que son Luis Serra y Ramón Termens.

 

¿Por qué las víctimas del franquismo se encuentran tan desprotegidas e invisibilizadas?

Aquí lo que hay es una democracia totalmente enferma donde se ha menospreciado a las victimas del franquismo. Y cuando una democracia no trabaja para lo que es la verdad, reparación y justicia, cuando los gobernantes no trabajan en esa dirección es realmente terrible. Habría que preguntarles a todas las personas que han gobernado desde que se inició la democracia porqué en este país todavía hay más de 100.000 desaparecidos, porqué existe el valle de los caídos, porqué no se resuelve el tema de los bebés robados, porqué el callejero de toda España, de Madrid especialmente, está lleno de calles de criminales, por qué torturadores de la dictadura han sido totalmente indultados en democracia y así podríamos seguir infinitamente. El tema es porqué, porqué, porqué y porqué. Porque esta no es una cuestión de si izquierdas si derechas, estamos hablando de dignidad humana, estamos hablando de derechos humanos, este es el tema. En una democracia normal, los partidos políticos, si fueran normales, tendrían que tener la verdad, justicia y reparación como punto número uno y principal de subvenciones. Es increíble que en cuarenta años de democracia todavía tengamos que estar hablando de este tema. Es realmente lamentable. No se está pidiendo ni venganza ni cosas raras. Se está pidiendo solamente que haya justicia como en otros países que también han sufrido dictaduras y donde han hecho algo por reparar. Por ejemplo, en Argentina, la Escuela de Mecánica de la armada que fue un centro de tortura, hoy es un museo y se lleva a los niños a conocer lo que ha pasado ahí. Aquí ¿qué tenemos?¿El Valle de los Caídos? Eso es una vergüenza y muy difícil de explicárselo a la gente y sobre todo nos han hecho creer que las transición ha sido modélica y esto no es así, porque si fuera así no habría ahora más de 100.000 personas desaparecidas, no habría esta cantidad de fosas por abrir. Se habla de que esto no hay que tocarlo porque es abrir heridas, ¿abrir heridas? ¿cuándo se han cerrado?¿Cuánto se habla de este tema en los colegios e institutos? Hay una desinformación terrible, la gente no sabe lo que ha pasado, no saben lo que ha sido de los crímenes del franquismo, no saben lo que ha sido luego la impunidad ya en democracia. Hay libros de texto en los institutos que les dedican una hoja a este tema y ni siquiera hablan de la dictadura franquista como dictadura, hablan que fue un régimen autoritario, es realmente lamentable.

Habría que preguntarles a todas las personas que han gobernado desde que se inició la democracia porqué en este país todavía hay más de 100.000 desaparecidos

 

¿Qué esperáis dando visibilidad a esta temática?

De las personas que puedan acceder a verla espero que les pueda transmitir sentimientos que les hagan reflexionar y querer investigar y saber más sobre el tema. De las instituciones políticas no espero absolutamente nada, me conformaría con que directamente no boicoteen. Para mi esto no es una película que se haya hecho para ningún partido político ni nada que se le parezca pero evidentemente hay personas, políticos, que pueden ser más afines que otros de querer que se hable de este tema. Parece que hay partidos y gente a las que palabras como verdad, justicia y reparación les pone nerviosos. Una democracia digna tiene que hacer justicia para que el país vuelva a la normalidad. Llevamos cuarenta años de humillación y es un problema de todos los demócratas, es un problema de todos, no solo de los familiares de las víctimas, aquí en España se pueden hacer cosas que por ejemplo en Alemania están prohibidas. Cuando un país sale de una dictadura tiene la obligación de hacer justicia. Existen torturadores que están en su casa. Esto no es normal.

 

¿Qué respuesta os ha llegado tras las presentación del documental?¿Qué gusta y que no gusta?

Por el momento la película ya se ha proyectado en Francia, en muchos sitios y mayoritariamente, yo estoy muy contento porque la gente sale muy movilizada, salen muy tocados, incluso alguna gente que conocen el tema sale tocada. Y gente que tiene menos conocimiento de todo esto sale totalmente sensibilizada. Esta es la idea del documental, que estos temas tan terribles no se pueden tocar de manera light. No se puede organizar una producción ni hacer una película de ficción de este tema de una manera light para que a uno le premien con subvenciones.

 

Eduard Fernández, el narrador del documental, nos cuenta qué le ha aportado personalmente.

 

¿Cómo te llegó la participación en este proyecto?

Yo conocí a Héctor hace muchos años. Estudié dirección de cine a los 16 años con Héctor Fáver en una escuela de cine. Continuamos con la amistad y me comentó lo del documental. Y a veces a uno le apetece colaborar en determinados proyectos. Quise colaborar y poner mi granito de arena. Me dijo de ponerle la voz y yo estuve encantado. Estuve un poco afónico cuando lo hice, pero luego el resultado me parece maravilloso, un poco más de dramatismo es bonito, yo encantado (risas). La vida tiene esas cosas.

 

¿Qué te ha aportado personalmente el documental?

Enterarme de muchas cosas de las que no estaba del todo enterado. Tenemos a veces nociones de cosas pero creo que hay cosas radicales en el documental que yo no sabía, como que España es el segundo país con más desaparecidos del mundo, flipé con el dato. Como que el robo de bebes era algo instaurado, no solo que robaran 3, 4, 5 o 10, me parece de lo peor que se puede hacer en el mundo. También se habla de cómo fue la transición, las dudas que hay sobre ella. Si pensamos que la forma en la que se hizo transición era la única manera, cuarenta años después es el momento de revisarla, de pedir perdón a alguna gente, de sacar a la gente de las cunetas, el que quiera desenterrar a su abuelo desenterrarlo, de ver qué paso con los niños… Si eso no se hace porque dicen “no meneemos las cosas” es sospechoso. El no querer menear las cosas es sospechoso.

Yo creo es necesario ver el documental, sobre todo para la gente más joven, porque existe un gran desconocimiento al respecto. Y que se revisaran las cosas sería muy bonito, sin ningún ánimo de revanchismo. Es momento de revisarlo todo.

 

¿Qué les dirías a aquellas personas que no han visto el documental para que se animaran a verlo?

Es cultura general muy sana para saber, que siempre es bueno saber más, que igual hay cosas que les sorprenden y que viva la cultura.

- Publicidad -
- Publicidad -

Relacionadas

- Publicidad -
- Publicidad -

DEJA UNA RESPUESTA

Comentario
Introduce tu nombre

- Publicidad -
- Publicidad -
- Publicidad -
- Publicidad -

últimos artículos

- Publicidad -
- Publicidad -

lo + leído

- Publicidad -

lo + leído