La Eurocopa 2016 está dando mucho que hablar, no sólo porque grandes selecciones como Francia, Alemania o Inglaterra no estén demostrando los grandes que son, sino porque una ola de violencia se ha apoderado de un campeonato que presumía de tener las mayores medidas de seguridad de la historia.
Un país con alerta máxima de terrorismo como Francia no debería permitir que en las calles de muchas de sus ciudades se lleven a cabo auténticas batallas campales entre hinchas de cualquier equipo. Pero más grave es aún que se permita la entrada de una pistola lanza bengalas, como ocurrió el sábado durante el encuentro entre Inglaterra y Rusia.
Esta acción podría haber terminado en tragedia si esa bengala da de lleno a alguno de los aficionados ingleses. De hecho, la UEFA amenazó a Rusia e Inglaterra con expulsarlas de la Eurocopa 2016 si se repiten las «escenas inaceptables» que precedieron y posteriores al partido entre ambas selecciones, que terminó 1-1. Durante esos altercados, un aficionado inglés, de aproximadamente 50 años de edad, resultó herido al recibir una golpiza por parte de hinchas rusos. El hombre se encuentra entre la vida y la muerte.
No obstante, estas no han sido las únicas peleas. Otra pelea la protagonizaron seguidores franceses que atacaron a aficionados turcos en las cercanías del Parque de los Príncipes. La ciudad de Niza también fue testigo de una riña entre jóvenes galos y seguidores de la selección de Irlanda de Norte, donde siete personas resultaron heridas. Y la última, se produjo este domingo antes del encuentro entre Alemania y Ucrania, cuando un grupo de aproximadamente 50 hooligans alemanes atacaron a algunos aficionados ucranianos.
La situación en diferentes puntos del país es tan tensa y extrema, que el Gobierno español enviará a Francia agentes de Policía Nacional para acompañar a los aficionados españoles y para ayudar a la policía francesa ante los enfrentamientos violentos en la Eurocopa. Así lo confirmó el ministro del Interior en funciones, Jorge Fernández Díaz.
España juega este lunes su primer partido de la Eurocopa frente República Checa en Toulouse (Francia), por lo que se espera que no se produzcan nuevos enfrentamientos entre fanáticos de ambas selecciones.
